El 28o Campamento Internacional de la Juventud Antifascista y Antiimperialista (CIJDAA) ha llegado a su fin. Jóvenes de todo el mundo se han reunido bajo el lema “Juventud unida por la paz y su futuro, contra el imperialismo y sus guerras”. Este encuentro es una clara muestra de que es posible construir un mundo donde primen la verdadera paz, igualdad y libertad. Lo que hemos logrado en este campamento, junto con las luchas emprendidas por jóvenes de todo el mundo, es un anticipo del cambio que puede traer la lucha internacional de la juventud.
Cientos de jóvenes nos reunimos en la República Dominicana entre el 18 y el 25 de agosto, debatiendo sobre cómo combatir a quienes expanden su dominio explotando a la clase obrera y a los pueblos. Delegaciones de Ecuador, México, Brasil, República Dominicana, Puerto Rico, Haití, Estados Unidos, España, Alemania y Turquía compartimos nuestras experiencias de lucha por los derechos juveniles y el cambio social, al tiempo que también intercambiamos nuestra música, bailes y culturas.
El mundo se encuentra bajo la sombra de las contradicciones interimperialistas, las crisis económicas, las guerras regionales, la ocupación y el saqueo de las potencias. Los imperialistas y sus colaboradores causan muerte y destrucción entre los pueblos. La evidencia más palpable es el genocidio perpetrado por el estado sionista de Israel, con el respaldo de Estados Unidos, contra el pueblo palestino. El número de muertos ha superado los 40,000, en su mayoría mujeres y niños. Las guerras depredadoras entre potencias imperialistas traen pobreza, hambre y desempleo a nuestras vidas, mientras que el gasto mundial en armamento ha ascendido a 2.4 billones de dólares. Este saqueo destruye la naturaleza, haciendo cada vez más frecuentes catástrofes como incendios forestales e inundaciones, que afectan principalmente a la clase obrera y a los pueblos, mientras los monopolios y grandes corporaciones se enriquecen saqueando los recursos naturales.
Los imperialistas, mediante las tensiones y conflictos que generan, allanan el camino para la organización de la extrema derecha, el nacionalismo y grupos reaccionarios que se posicionan contra la clase obrera, el pueblo y la juventud que lucha. La creciente tendencia fascista en algunos países está siendo organizada por las potencias imperialistas para consolidar su dominio en todo el mundo, promoviendo la violencia reaccionaria, la hostilidad hacia los inmigrantes, el racismo, políticas sexistas y prácticas destinadas a reprimir la oposición social.
Los imperialistas se están llenando los bolsillos robando el futuro de la juventud. Hay ataques sistemáticos contra el derecho a la educación, salud, empleo y una vida digna para los jóvenes en todo el mundo, mientras se aumentan los presupuestos militares. Las condiciones laborales de la juventud empeoran con la precariedad, extensas jornadas de trabajo que no permiten descansar, alimentarse o ejercitarse adecuadamente, todo por sueldos miserables. La OMS señala que una de cada siete personas de entre 10 y 19 años sufre depresión, y el suicidio es la cuarta causa principal de muerte entre los jóvenes de 15 a 29 años. La salud mental es otro de los frentes de lucha que impone este sistema.
El paramilitarismo y el narcotráfico también amenazan la vida de los jóvenes como mecanismos de intimidación y opresión. El crimen organizado, aprovechando la vulnerabilidad de las juventudes, atrae a muchos con falsas promesas de sustento. Esta escalada criminal es parte inherente de la corrupción del sistema.
Si el imperialismo, la burguesía y sus fuerzas represivas se preparan para nuevas guerras, es imprescindible que nosotros fortalezcamos nuestra organización y lucha desde los sectores democráticos y de izquierda. Debemos concentrar nuestras energías en la agitación y propaganda, utilizando todos los recursos disponibles, especialmente los medios digitales, el arte y la cultura. Las herramientas políticas, como nuestros periódicos, han sido fundamentales en el crecimiento de nuestras filas y el fortalecimiento del trabajo político entre la juventud.
Solo con un conocimiento concreto de la situación global, nuestra generación podrá enfrentar los retos cotidianos y contrarrestar la ideología de los ricos, que se difunde a través de numerosos medios. Para ofrecer una alternativa a esta visión del mundo, debemos ocupar todos los espacios, físicos y virtuales, con la propaganda de nuestras ideas. ¡Aumentemos la organización de la juventud y nuestra lucha por el fin de la explotación y la agresión imperialista!
La juventud quiere vivir, pero el capitalismo nos asesina todos los días. La juventud quiere estudiar, pero nuestras escuelas cierran y las universidades se precarizan. Queremos acceso al ocio, la cultura y el deporte, pero no existen incentivos. Deseamos una perspectiva de vida distinta, pero el sistema nos oprime y limita, poniendo en riesgo nuestro futuro y la existencia misma del planeta.
Los debates en el CIJDAA nos han planteado la necesidad de organizar a la juventud para fortalecer la lucha de clases en nuestros países y en todo el mundo, aliándonos con la clase obrera en la defensa de la transformación social y la revolución. Así, seguiremos desenmascarando el sistema capitalista-imperialista y avanzando hacia la organización de la revolución y la construcción de una nueva sociedad socialista.
La lucha por un mundo mejor no es fácil. El camino de la rebeldía contra este sistema está plagado de peligros y ataques por parte de aquellos que desean mantener sus privilegios. En este proceso, muchos compañeros han caído ante la violencia del sistema. Rendimos homenaje a todos aquellos que han sido víctimas de la represión. A diez años de la desaparición de los 43 estudiantes de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa, exigimos justicia. Igualmente, honramos la memoria de Sarah Silva Domingues, líder juvenil en Brasil, y condenamos la brutal agresión contra Rosseel Rivera, de la Unión Juvenil Revolucionaria Mexicana, durante las protestas en solidaridad con Palestina.
Es posible desmantelar el sistema salvaje que los poderosos han impuesto manteniendo vivo el recuerdo de nuestros camaradas y levantando más alto sus banderas. Impulsemos las luchas en cada uno de nuestros países y opongámonos con firmeza a la violencia y explotación imperialista. El 28o CIJDAA ratifica su compromiso de integrar a la juventud del mundo en la lucha por la liberación nacional y social, contra la guerra imperialista y por el socialismo.
¡Viva el 28o Campamento Internacional de la Juventud Democrática, Antifascista y Antiimperialista!
*¡Viva la lucha de la juventud, los trabajadores y los pueblos del mundo!
¡Abajo el imperialismo y sus guerras!
FUENTE: periódico Lucha del PCT. Edición No. 426, Santo Domingo. RD. Septiembre 2024.
