jueves, 5 de marzo de 2020

LA JCE, EL GOBIERNO DE DANILO Y EL PLD, AGRIPINO, ALMAGRO, CONSPIRAN CONTRA LAS ELECCIONES MUNICIPALES

Por: Fortune Modeste Valerio
Las supuestas “irregularidades técnicas” que boicotearon y posteriormente provocaron la suspensión de las pasadas elecciones municipales, todavía no han sido aclaradas. Sino se esclarece lo ocurrido, y se aplican las sanciones correspondientes, no es posible confiar en celebrar nuevos comicios transparentes y limpios.
–Nos jodimos, la OEA es la encargada de investigar esas "irregularidades técnicas". Sus resultados se darán después del palo dao– ¡Alerta!
En la población no hay confianza en esa JCE; tampoco en el mal llamado diálogo con un organismo del gobierno y encabezado por el triste y célebre "cura del diablo", Agripino Núñez Collado. Que ha bendecido la obra cumbre de la corrupción y la impunidad de Danilo y el PLD, la Central Termoeléctrica de Punta Catalina.
Si esa JCE no sirve para nada, que busca dirigiendo y organizando el proceso electoral. Demostró incapacidad y estar al servicio de los planes fraudulentos de Danilo y el PLD. La JCE no es confiable y debe ser cuestionada por los partidos políticos y la sociedad civil, evitar que repita el tollo y beneficiar al gobierno.
En el famoso diálogo deben estar todos los actores protagónicos del proceso electoral, incluyendo los sectores de jóvenes. Que han encabezado las manifestaciones frente a la Plaza de las Bandera. Las elecciones limpias y transparentes no se consiguen "negociando" entre corruptos, farsantes, y de espalda a la población.
Ahora el "cura del diablo" quiere bendecir, el fraude instalado por el gobierno y la JCE, con su trasnochado y desacreditado diálogo. ¡te conocemos bacalao aunque venga disfrazao! Nadie se opone a una conversación sincera y franca, donde estén todos los sectores sin exclusiones. Una mesa para conversar presidida por un farsante y asesorada por agentes extranjeros expertos en conspiraciones, intervenciones y fraudes, es caer en las garras de los patrocinadores de la trampa.
Los jóvenes tienen que participar en el proceso de montaje de las elecciones municipales. Desde la "varilla iniciar hasta la pintura final"; es decir, instalando el Colegio Electoral, el conteo del último voto, registro y envío de la última acta. No hay confianza en esa JCE, ni en el diálogo entre los partidos políticos. Ustedes son unos tramposos que se truquean...
–La batalla será Colegio por Colegio–
Las movilizaciones, entre otras cosas, de jóvenes y la población deben continuar. Es el único mecanismo de presión, verdaderamente imparcial, que impedirá a la JCE, el gobierno de Danilo y el PLD, imponer un fraude electoral para desconocer la voluntad popular expresada en las urnas.
De Almagro, el de la OEA, cuidado es un pájaro de mal agüero.



martes, 3 de marzo de 2020

¡HASTA SIEMPRE, CANCEL MIRANDA!

Por: Virtudes Alvarez
Un GRANDE de la lucha por la independencia y la soberanía puertorriqueña ha fallecido: Rafael Cancel Miranda.
El último sobreviviente del comando nacionalista que el 1 de marzo del 1954 atacó la Cámara de Representantes del Congreso de los Estados Unidos.
Un gran ser humano. Luchador antimperialista; unitario, amable, con un permanente sentido del humor; dio ejemplo de integridad y firmeza revolucionarias durante toda su vida.
Junto a Lolita Lebrón, Irving Flores Rodríguez y Andrés Figueroa Cordero, "disparon unos tiritos" - como solía decir entre risas- en la Cámara de Representantes, en Washington. Fueron sentenciados a cumplir 84 años de prisión. A los 25 años y seis meses, tras permanecer en varias cárceles federales estadounidenses, lograron su libertad.
Antes de aquel heroico hecho habia estado encarcelado durante dos años, por negarse a inscribirse en el ejercito estadunidense y participar en la Guerra contra Corea.
Como dice la compañera Liliana Laboy "nuestra tristeza es grande, pero más grande es su legado".
Cancel Miranda, vivirá por siempre en cada rincón caribeño; en la memoria, el puño y cada acción de todo hombre y mujer de este Caribe anticolonialista, que más temprano que tarde será libre de toda potencia extranjera o se hundirán las islas, parafraseando a nuestro patricio Juan Pablo Duarte.
¡Puerto Rico vencerá y será libre!
¡Le recordaremos siempre con el respeto, admiración y cariño que supo ganarse de toda persona de bien que le trató, o conoció su historia y grandeza humana!
¡Hasta siempre, Cancel Miranda!



sábado, 29 de febrero de 2020

MI AGRADECIMIENTO AL PERIÓDICIO DIGITAL ACENTO


                          Por un artículo de Manuel Salazar

Por: Fortune Modeste Valerio

No sería justo seguir embadurnando páginas y tecleando en mí PC, sin sacar tiempo en agradecer la oportunidad de expresar lo que pienso, al periódico digital Acento; en particular a su director ejecutivo, periodista Fausto Rosario Adames. Las oportunidades hay que aprovecharla sin olvidar el nombre y apellidos de aquel que te abre la puerta para continuar cabalgando.

Todo surgió de manera fortuita, sin planificarlo, de una honorable mención en un artículo del dirigente comunista, Manuel Salazar, publicado precisamente en Acento. Procedí, sin ánimo de polemizar, en escribir una reflexión acerca del trabajo del compañero Manuel. De inmediato consulto con camaradas sobre la forma de cómo «caerle» al periódico Acento.
Después de permanecer un largo tiempo fuera del país, no conozco casi a nadie en los medios. Mis consultas fueron desalentadoras; con diferentes argumentos intentaron matar el «gallo en la funda». Prosigo mi consulta y contacto al historiador y periodista, Alejandro Paulino Ramos. Es quien me inyecta corriente 220v y de inmediato me facilita el número de teléfono, email; y no faltaron las recomendaciones de lugar, como buen comunicador y luchador de los 12 años aquellos.



¡Ah, se olvidaba! Había llamado al periódico y de manera automática me dicen que envíe el trabajo y me devolvían la llamada. No me convencieron. Y sigo con las consultas. Me describieron un panorama desfavorable para mi intención de comentar el texto de Manuel. Muchacho, ahí no te van a publicar eso; tú no sabes quienes son esa gente, por tu forma de escribir ni intente, y así sucesivamente.

—Pero que va, no lograron malograr mi firme propósito de enviar el texto a Acento para comentar el artículo de Manuel.

Quiero que sepan, antes de seguir, que fue un privilegio la mención de Manuel Salazar. Un hombre sencillo, respetuoso y revolucionario. Fue dirigente del FEFLAS, de la FED y actualmente, secretario general de Partido Comunista del Trabajo, PCT. También, es doctor en Economía y profesor de la UASD. 
Con las informaciones del historiador y periodista, Paulino Ramos, contacto por email al señor Fausto Rosario, expresándole, con cuidado, el derecho a replica ante un trabajo de Manuel Salazar que mencionaba mi nombre. ¡Vaya sorpresa! No hay problemas, envíe el artículo con una foto y una breve descripción. Fue el recibimiento del director de Acento. Aquel ogro que me pintaron e iba a rechazar mi comentario a Manuel. No solo fue eso, me contacta de nuevo y me solicita; por favor, envíe el texto antes de las 12:00pm.

No lo pueden creer; estaba en shock ante la decencia, solidaridad y atenciones del señor director de Acento. Señores, el hombre me publica el artículo. Que bien me sentí al ver hecho realidad una intención que quisieron frustrarla con conducta muy mal administradas, informaciones exageradas; aunque, quizás con algunas razones, desconociendo una verdad que golpea la cara y todo el cuerpo.

De esa publicación en adelante, ha sido un catchup, le ha seguido 29 textos en cinco meses, sin mancar; por el contrario, hay semanas que abuso y le envío dos trabajos semanales. He decidido no abusar demasiado, para evitar que me manden pal carajo. Mis entregas serán los domingo, si Dios quieres.

Esto no se queda ahí. Fui a las instalaciones de Acento, tuve que buscar la dirección en Google, porque había olvidado las calles de la capital.  Me presento a sus oficinas para conocer al Director y expresarle mi agradecimiento. Su trato fue exquisito; una conversación constructiva, aleccionadora y sobre todo, las puertas abiertas para continuar publicando los trabajos. Le he dicho, me dice Fausto Rosario, a los dirigentes de izquierda, particularmente a Manuel, escriban, utilicen los medios y orienten a la población, ya que la edición de un periódico es bastante costosa.
No podía limitar mi agradecimiento a la visita que hice a las instalaciones del periódico digital Acento, al periodista Fausto Rosario; si no expresarlo pública y responsablemente, y exhortarle a mantener esa puerta abierta a la diversidad de opinión para enriquecer al lector. Ya, como dijo el Apóstol de la Independencia de Cuba, José Martí: «Honrar Honra».
Reflexiones al artículo de Manuel Salazar:

 https://acento.com.do/2019/opinion/8742583-a-manuel-salazar-con-carino/




viernes, 28 de febrero de 2020

EL PROCESO DE LA INDEPENDENCIA DOMINICANA (1808-1873)

Por: Filiberto Cruz Sánchez
(“Tengo la idea de que la independencia germinó en Santo Domingo desde principios del siglo XIX; pero no se hizo clara y perfecta para el pueblo hasta 1873". Carta de Pedro Henríquez Ureña, desde México, a Federico García Godoy , de fecha 5 de mayo de 1909. Publicada en la revista Cuna de América, año III, número 127, del 6 de junio de ese año).
El objetivo del presente ensayo es demostrar que la idea de la independencia dominicana no cristalizó definitivamente en las efemérides patrias a cuya celebración nos convoca cada año la historia oficial, sino que la misma fue el resultado de un largo proceso germinado en los albores del siglo 19 y que "se hizo clara y perfecta para el pueblo" a finales de 1873, con la derrota del gobierno anexionista de Buenaventura Báez.
La historiografía tradicional ha logrado arraigar en la creencia de los dominicanos que los sucesos del 27 de febrero de 1844 representan el punto de partida de nuestra efectiva independencia nacional y que los combates militares iniciados el 16 de agosto de 1863 significaron la derrota definitiva del ideal anexionista encarnado en la figura del general Pedro Santana.
Ese principio y fin de nuestra idea de independencia tiende a ignorar otras realidades vividas por los dominicanos antes y después de ambas efemérides. En el presente ensayo encontraremos que desde 1801 surgieron en Santo Domingo las primeras manifestaciones de un sentimiento independentista que tomó fuerza en las refriegas contra los remanentes de la invasión francesa iniciada en 1802 y más adelante, contra el moribundo colonialismo español.
No me refiero al proyecto político de José Núñez de Cáceres, sino a la serie de movimientos ocurridos desde septiembre de 1803, que dieron cuenta de un creciente despertar de la conciencia de los dominicanos en pos de su propia identidad y autodeterminación. Más tarde, la asamblea nacional reunida en la comunidad de Bondillo en diciembre de 1808 y las rebeliones armadas ocurridas en 1810, 1812 y 1813 fueron otras indicaciones de ese despertar. El más importante de estos hitos históricos, el encabezado por Ciriaco Ramírez, provino de un sector de clase media vinculado a las actividades mercantiles de la época.
Ese despertar de la conciencia nacionalista de los dominicanos se vio estimulado por los acontecimientos acarreados por la revolución francesa en su colonia de Saint Domingue y la invasión napoleónica a España en marzo de 1808. Sabemos que la gran revolución francesa impactó a sus vecinos ibéricos y que su onda expansiva trastornó también la vida de su rica y próspera colonia caribeña, provocando unos acontecimientos que afectaron el ritmo pausado de la parte española de la Isla de Santo Domingo. Además, eran frecuentes en los primeros años del siglo las incursiones de agentes suramericanos que visitaron algunas ciudades costeras dominicanas, incitando a sus habitantes a rebelarse contra la dominación colonial española. Se vivía pues, en aquellos años, un entorno internacional que estimulaba a los dominicanos a luchar por su emancipación política.
Más adelante, cuando las colonias hispanoamericanas culminaron sus luchas independentistas contra el imperio español, ocurría en Santo Domingo un golpe militar encabezado por José Núñez de Cáceres contra las autoridades españolas. Este acontecimiento, llamado con cierto eufemismo "independencia efímera", ha sido muy relegado por la historia oficial y sus gestores, tal vez porque sus cabecillas, miembros de la élite criolla, pusieron fin a la dominación colonial española, o porque la misma produjo un vacío de poder que sería aprovechado por el gobierno haitiano, que 70 días después anunció la ocupación militar de Santo Domingo.
Núñez de Cáceres publicó, el 1 de diciembre de 1821, una extensa Declaratoria de Independencia del Pueblo Dominicano, un Acta Constitutiva del Gobierno Provisional del Estado Independiente de la Parte Española de Haití, con 39 artículos, un gabinete de siete miembros y un secretario; un Manifiesto donde trató "los hechos y consecuencias del cambio político efectuado" en la ocasión; un Acta de la Sesión del 4 de Diciembre de 1821 de la Junta Provisional de Gobierno del Estado Independiente de Haytí Español, entre otros documentos históricos, reveladores de las luchas realizadas por este sector social esclavista que buscó asociar su suerte política a la recién creada confederación bolivariana.
Casi siempre, cuando se celebra la efemérides del 27 de febrero, se destacan en primer plano el tema de la ocupación haitiana y sus efectos en Santo Domingo. La tradición aconseja enfatizar sobre un largo rosario de agravios ocasionados por los ocupantes a los habitantes de la parte oriental de la isla, agravios que dieron origen a un prolongado sentimiento anti-haitiano en la sociedad dominicana. En realidad, lo que representa la noche heroica del 27 de febrero es el inicio de la separación definitiva del pueblo dominicano de la República de Haití. El único sector político que proclamó y luchó por la independencia, sin éxito inmediato, fue el trinitario o duartista, cuyo movimiento sería derrotado y desarticulado para siempre por el sector retrógrado y anexionista encabezado por Pedro Santana, continuador de la cultura política del caudillo Juan Sánchez Ramírez, primer gobernador dominicano al servicio de España.
Bajo la influencia política y militar del general Santana se convocó y sesionó la primera Constituyente, se votó la Constitución de San Cristóbal y se formalizó la existencia del Estado dominicano. El sector dominante, integrado por terratenientes, antiguos funcionarios del gobierno haitiano e intelectuales hispanistas, controlaron la vida pública durante los primeros años de la república. Su visión no era mantener la existencia de un Estado libre, democrático e independiente, sino esperar las circunstancias favorables para entregar el país a una de las grandes potencias extranjeras de la época a través de un protectorado o por medio de la anexión.
A pesar de varios intentos, la idea del protectorado jamás prosperó durante los años de la Primera República, período durante el cual hubo que enfrentar y derrotar nuevas invasiones militares haitianas que buscaban dejar sin efecto la acción separatista del 27 de febrero.
Un año después de la última invasión haitiana, estalló la primera guerra civil entre los dominicanos, provocada por los fraudes monetarios del segundo gobierno de Buenaventura Báez que afectaron a los productores y comerciantes del tabaco cibaeño. En 1857 los líderes políticos y militares del norte proclamaron un gobierno paralelo en Santiago de los Caballeros y en febrero del año siguiente votaron la primera Constitución democrática de la historia dominicana, la cual sería desconocida por Santana tras regresar al país en medio de los combates por expulsar a Báez del poder.
Ambos personajes se habían separados para siempre en 1853, tras concluir el primer gobierno del caudillo sureño. Las pugnas entre ellos concluyeron con la vuelta al poder del caudillo seibano en julio de 1858. Ambos caudillos conservadores jamás asimilaron la idea de la independencia nacional. En sus últimos gobiernos, uno se decantó por la anexión del país a España y el otro por la anexión a favor de los Estados Unidos de América.
Tras la primera anexión, consumada por Santana en marzo de 1861, vinieron las protestas y las rebeliones armadas de los dominicanos. La resistencia contra los invasores españoles fue larga y persistente, con sus altas y sus bajas, y gracias a que el movimiento contó con el apoyo de la población campesina, que era la inmensa mayoría, los líderes políticos y militares de la revolución pudieron derrotar al poderoso y bien disciplinado ejército español.
En medio de los fragores de la guerra se produjo la muerte repentina del general Santana, principal autor de la anexión. Se pensó que con su partida y la derrota humillante de los invasores se había extinguido el ideal anexionista en la sociedad dominicana de entonces. Sin embargo, el triunfo de los restauradores en julio de 1865 no representó el fin de la lucha por mantener en pie la república ideada y fundada por Juan Pablo Duarte y sus discípulos. Aún seguía con vida y divagando por playas extranjeras el otro gran paladín del anexionismo decimonónico. Aprovechando las nuevas rivalidades políticas surgidas entre los líderes restauradores, Báez retornó al poder una y otra vez y en mayo de 1868, cuando todavía no se habían enfriado del todo los cañones que hicieron posible la derrota de la última invasión hispana en Santo Domingo, instauró su cuarto gobierno, el de mayor duración de los cinco que encabezó.
En el presente ensayo se demuestra que el norte principal del "Gobierno de los seis años" fue revivir y hacer realidad el viejo ideal anexionista, ahora a favor de los Estados Unidos de América, un país que experimentó un enorme desarrollo capitalista después de 1865, cuando culminó su guerra civil. Báez instauró una dictadura cívico-militar y jamás cesó en su empeño de vender parte o todo el territorio dominicano a los estadounidenses, provocando que los líderes restauradores echaran a un lado sus diferencias para encabezar otra contienda larga y complicada llamada "Guerra de los seis años". Se trató, en esencia, de una guerra civil y una guerra patriótica, de reafirmación del ideal independentista "que se hizo claro y perfecto para el pueblo" a finales de 1873, cuando sectores del baecismo se vieron forzados aliarse con la triunfante resistencia patriótica para poder derrocar al gobierno del ex Mariscal de Campo del ejército español.
Sin embargo, la derrota definitiva del morbo anexionista, simbolizado en las figuras de Báez y Santana, no significó que los grupos oligárquicos del país y sus intelectuales, de reconocida tendencia conservadora y entreguista, continuaran acariciando y propiciando la idea del amparo o la ayuda de potencias extranjeras para seguir disfrutando los privilegios que siempre ha otorgado el uso y abuso del poder en República Dominicana.
(Posdata: Amigos de Facebook, esa es la Introducción de mi ensayo histórico impreso en septiembre de 2019 y que será presentado al público en marzo venidero en un acto que organizará la Escuela de Historia y Antropología de la UASD)

FUENTE: https://www.facebook.com/filiberto.cruzsanchez/posts/3123472457685181



jueves, 27 de febrero de 2020

APROXIMACIÓN A DUARTE

Por: Dantes Ortiz Núñez
Cuando España cedió a Francia la parte Este de la isla La Española, en 1795, las familias criollas que pudieron salir del territorio emigraron a Puerto Rico, Cuba y Venezuela, entre los emigrantes estaba la familia Duarte-Diez.
La dinámica de los sucesos históricos fue intensa, entre 1802 y 1809 fue la dominación francesa, que concluyó luego de la Batalla de Palo Hincado en noviembre de 1808; advino la Junta de Bondillo en diciembre de ese mismo año y la reincorporación a España, pero los franceses continuaron luchando para no entregar la plaza, aunque al fin lo hicieron en junio de 1809, cuando se rindieron ante una escuadra inglesa.
Con la reincorporación a España se inició el período de la España Boba y la familia Duarte-Diez regresó de Puerto Rico. Para 1813 nació Juan Pablo estando la colonia atravesando una aguda crisis económico-social y los criollos se hacían sentir como comunidad en busca de su autodeterminación, lo que se expresó en más de siete complots proto autonomistas. Duarte creció en medio de una prolongada crisis del modelo colonial español en toda Hispanoamérica, misma que se hacía sentir aquí con particular dramatismo.
Estudios
A los 17 años Duarte viajó a Estados Unidos a estudiar inglés y luego a Europa donde residió hasta 1832. Uno de sus maestros era de nacionalidad haitiana y lo introdujo en la cultura francesa muy en boga en esa época, lo que le permitió aprovechar al máximo su estadía en el viejo continente. En Barcelona fue influenciado por el Romanticismo, entonces en auge, tuvo contactos con las prédicas de los Carbonarios de Italia. Estudió geografía, drama y teneduría de libros.
Al regresar fundó una escuela de cuadros políticos donde convergieron más de 20 jóvenes capitalinos, en ella se discutía de filosofía, política, teatro y se entrenaban en esgrima. Duarte ingresó a la guardia haitiana y otro tanto hicieron sus camaradas, donde recibieron entrenamiento militar que les sería de mucha utilidad, en especial entre 1844 y 1856.
Mujeres
Juan Pablo estimuló a las mujeres para participar en las actividades conspirativas en forma protagónica, a éstas se les conoció como “Las Comunicadas”.
En esa época eso fue excepcional puesto que la mentalidad dominante no admitía mujeres en política y menos organizadas. Esa participación desafiaba la ideología conservadora.
En tanto La Filantrópica distribuía volantes y agitaba políticamente, La Dramática hacía veladas culturales donde presentaba obras teatrales y la vanguardia trinitaria se desplazaba a los pueblos en labores proselitista, ellas hacían labores de apoyo logístico.
Desde 1836 la opresión nacional del Estado haitiano sobre el pueblo-nación dominicana había entrado en crisis y se manifestaba tanto en Haití como en la parte Este.
Sintomatología de la crisis era el descontento de los diputados haitianos que complotaban contra Juan Pedro Boyer que gobernaba desde 1818.
La crisis de gobernabilidad se hizo aguda en 1843 cuando se produjo la Revolución de la Reforma, gestada en el seno de la Cámara de Diputados y a ella se adhieren Los Trinitarios derrocando militarmente al gobierno.
Mientras, un grupo de connotados miembros de la oligarquía aprovechó para firmar un pacto con el Cónsul francés y así boicotear el objetivo de los jóvenes liderados por Duarte de crear un Estado Independiente de toda potencia extranjera.
En un territorio sin carreteras, inhóspito, con apenas 126,000 habitantes, sin las clases fundamentales del capitalismo, en crisis económica y con mayoría iletrada, la propuesta independentista chocó con los intereses de los conservadores que tenían mayor peso social e ideológico y sólo aspiraban a la separación de Haití para luego vincularse como súbditos a una potencia colonial.
Entre marzo del 1843 y febrero de 1844 los acontecimientos se sucedieron con inusitada rapidez y Duarte supo actuar con gran tacto político sin perder de vista el objetivo estratégico de la independencia. Se vio precisado a salir al exilio, empero no cejó en las tareas libertarias.
Sus escritos, su proyecto de constitución, sus epístolas y el dictado de sus memorias a su hermana constituyen fuentes invaluables de su accionar y pensamiento. Lo mismo que los testimonios de quienes conocieron su labor procera. Murió en el exilio luego de muchas vicisitudes en Caracas en 1876, a los 63 años.
No obstante ser un personaje altamente historiado, su vida y labor organizativa, siguen siendo harto desconocidas. Se precisa una sistemática labor de indagatoria histórica, de reescritura de su accionar, de divulgación de las circunstancias en que vivió y, sobre todo, pedagógica para rescatar su dimensión y situarlo donde le corresponde entre los niños y jóvenes llamados a emular su ejemplo imperecedero, hoy sometido a ataques por personas carentes de dignidad y al servicio de intereses espurios.
FUENTE: https://elnacional.com.do/aproximacion-a-duarte/



miércoles, 26 de febrero de 2020

CONVOCAN A PARTICIPAR EN MARCHA DE LA DEMOCRACIA



martes, 25 de febrero de 2020

CADA GENERACIÓN RESPONDE A SUS CIRCUNSTANCIAS POLÍTICAS Y SOCIALES

Por: Manuel Salazar
La juventud de hoy responde con inteligencia y gallardía a las circunstancias actuales.
Juega su papel.
Los jóvenes de ayer, hoy viejos, jugaron y todavía juegan también su papel.
La juventud dominicana es oprimida. Carece de derechos fundamentales.
La juventud dominicana cuenta para sus luchas con la apertura política conquistada en 1978. Hoy, existe una cobertura mínima de libertades públicas y derechos que permiten manifestaciones en plazas públicas de manera abierta.
Cuenta también con el Internet y las redes sociales para informarse e informar.
Los jóvenes de hoy tienen mayores posibilidades de desarrollar inteligencias.
La juventud de antes de 1978, la que sufrió la represión de la dictadura de Trujillo y la de los 12 años, no podía visitar plazas. Ni leer de manera abierta libros comunistas.
Las manifestaciones eran micromitines de tres minutos y desaparecer rápido.
Las cárceles estaban llenas de jóvenes. Que permanecieron hasta 20 años en la cárcel.
Los cementerios están llenos de tumbas de esos jóvenes que fueron asesinados por sus luchas.
Las calles llevan los nombres de esos jóvenes muertos de manera gloriosa, porque fueron asesinados por sus luchas e ideales.
Esos jóvenes no podían ir al cine, ni a fiestas. No podían inscribir en sus cédulas que su ocupación era "estudiante". Porque con eso se condenaban a muerte o a la cárcel.
La lucha tesonera de esa juventud, con el fusil en las guerrillas; en la clandestinidad, en los liceos públicos y en la UASD , contribuyó a echar abajo los regímenes autoritarios.
Con esas luchas se conquistó la apertura política que hace posible la toma de plaza públicas.
Con esas luchas se conquistó el derecho de los sectores populares a estudiar en la UASD. Por ejemplo.
Sin aquellas luchas y sacrificios de los jóvenes de antes, que hoy somos viejos militantes, no habría posibilidades mínimas de luchas abiertas, de masas.
Las luchas de los jóvenes de ayer fueron gloriosas. Las luchas de los jóvenes de hoy son maravillosas, y dentro de pocos años la historia las reconocerá como gloriosos también. Cada una en sus circunstancias.
Lo dijo Ortega y Gasset que. "El hombre es él y sus circunstancias...". Yo diría hoy que los seres humanos somos nosotros y nuestras circunstancias. Para incluir el género, que en sus tiempos, Ortega y Gasset no podía tenerlo tan en cuenta.
Duarte y los Trinitarios fueron jóvenes que respondieron a los reclamos de sus tiempos. Así mismo Luperon y la Restauradores. Las hermanas Mirabal, Manolo y los del 1J4, también. Caamaño y Fernández Domínguez por igual. Maximiliano Gómez El Moreno, Amin Abel, Amaury y Los Palmeros, Orlando Martínez y muchos jóvenes, se las jugaron y perdieron sus vidas en defensa de la causa de la patria y del pueblo.
Hay que encadenar las luchas y experiencias de las luchas de las distintas generaciones, y apuntarlas al objetivo de poner fin a la opresión y conquistar la liberación nacional y social.
Hay que alentar esa perspectiva.
Viejos de hoy que fueron jóvenes ayer, glorifican sus días de ayer y minimizan los hechos y sacrificios de los jóvenes de hoy.
Jóvenes de hoy glorifican sus luchas actuales, y pretenden que esa es la historia, y que los viejos de ayer no existen.
Ya quisiera el imperialismo y las clases dominantes poner en relieve esa falsa contradicción entre generaciones.
Sería estúpido hacerle el juego.
La lucha sigue, como ayer, hoy, mañana y siempre.