viernes, 22 de julio de 2022

La orfebrería de Manuel

Por Fortune Modeste Valerio 

Así he calificado los esfuerzos unitarios del Partido Comunista del Trabajo, (PCT) y su secretario general, Manuel Salazar. Entidad política, junto al Movimiento Patria Para Todos y Todas (MPT), constituyen las principales fuerzas políticas, en la actualidad, del movimiento revolucionario dominicano. Sus responsabilidades históricas, para conseguir la unidad de acción y electoral de sectores sociales, populares, democráticos, progresistas y de izquierda, pesa más que la Cordillera Central de la república.

La circunstancia es una categoría histórica que no se detiene. Hay que saber aprovechar, cuando se presenta, esa oportunidad para avanzar en todos los sentidos. Y es lo que hemos hecho. Particularmente el tema de la unidad de los democráticos, progresistas y de las izquierdas, ante la presente coyuntura, ha ocupado gran parte del tiempo. Ha sido un periodo intenso en conversaciones, elaboración de artículos de opinión, intercambios de textos. participación en los actos, asambleas celebradas, etc. La verdad que se ha aprendido mucho, sobre todo, guardar paciencia crítica frente a las eventualidades. 

Generalmente, el ser humano pone atención en aquellos obstáculos que impiden alcanzar sus propósitos. No se queda quieto en la búsqueda de una fórmula que pueda derribar esas barreras que impiden avanzar. Por consiguiente, son alentadores, por fin, los esfuerzos unitarios que se observan en los distintos sectores que conforman el amplio espectro democrático, progresista y de izquierda. 

El historial de la izquierda, relativo a la unidad, ha sido traumático. Pero se tiene, en el momento, un escenario favorable al mismo, con la disposición de la mayoría de sus integrantes a incorporarse a un proyecto de nación teniendo como base el movimiento social, popular, ambiental, feminista, etc. A lo que Manuel ha reiterado en varias ocasiones: “Es un asunto de orfebrería. Un trabajo delicado, hacerlo con paciencia y las herramientas necesarias. Sin adelantarse al tiempo ni ir detrás, de manera cautelosa. Y no ponerle atención a nimiedades, estamos acostumbrados”.

Orfebrería es el trabajo artístico del orfebre. Este último es el que diseña, confecciona y elabora joyas y otros productos, teniendo como base metales de la categoría del oro, plata, cobre, etc., y sus aleaciones. Es una tarea muy especializada que tiene sus técnicas de fabricación y de decoración. 

Etimológicamente, la orfebrería deriva del vocablo latín aurum, que significa “oro” y de fabero o fabri que significa artesano u obrero. Se le considera parte de las artes plásticas, porque utiliza y transforma metales preciosos para la creación de su obra. Su historia es antigua. Se ubica en la prehistoria.

La orfebrería es prácticamente desconocida en nuestro país. A pesar de tener muy buenos artesanos que trabajan el Ámbar y el Larimar, piedras preciosas criollas. República Dominicana tiene la mayor reserva minera de las Antillas Mayores, desde oro, plata, cobre, zinc, bauxita y níquel. En 23 y 32 provincias, se encuentran minas de esos valiosos recursos naturales. Y con todo y esto, el orfebre brilla por su ausencia.

Así son las cosas en un país atrasado y dependiente. Pero volvemos, para no perdernos en el camino, con la orfebrería de Manuel. 

Real y efectivamente, se necesita la capacidad, paciencia, tolerancia y el tiempo de un orfebre para bregar con los trabajos unitarios en los sectores progresistas, democráticos y de izquierda. Los matices y conductas personales, son los mayores obstáculos, porque las reflexiones sobre la coyuntura en desarrollo, la contradicción principal y secundaria y el blanco del momento, están claros, y se coinciden en gran parte de los puntos colocados en la palestra. 

Con el programa de gobierno, creo que nadie está fuera de sus cabales para presentar algo que no se enmarque dentro del proceso democrático que se transita. Se requiere hacer ajuste para evitar los inventos desaforados.

Para el orfebre, viene siendo un político con sus dos pies en la tierra, no hay problema alguno. En el movimiento revolucionario, progresista, democrático, popular y social, se encuentran los metales preciosos y productos orgánicos de origen natural, en condiciones de convertirse en hermosas joyas de valía incalculable. Solo se requiere, eso sí, de una orfebrería con muy buenos artesanos, que tengan inteligencia y creatividad, capaces de agregarle valor a los que el pueblo, con su historia, luchas y experiencias, nos ha transmitido.

Fortune Modeste V.


jueves, 21 de julio de 2022

De Patrones y Peluches

Por Ángel Pichardo Almonte

Este inicio de provocación a escribir y debatir, parte de mis observaciones en algunas discotecas.

Tratando de encontrar un hilo reflexivo que nos permita caracterizar esta dinámica de socialización urbana, las trazabilidades del atuendo, la semiótica de los espacios y las conexiones de las interrelaciones que marcan un ritmo a la sociedad del ocio, posible hedonismo, exhibicionismo, gestualidad, sexualidad, etc.

El ambiente es ruidoso, el DJ se encarga de la animación. El Patrón va en pinta: t-shirt, jeans, tenis combinados, y las cadenas de oro, “certificadas por Melvin”, los brazaletes y relojes, anillos con grandes piedras y “la moña” en cada bolsillo. Ya el Patrón va con vape dorado.

La Peluche viste ropa ceñida a su cuerpo o pequeñas blusas sin sostenes, faldas cortas o lycras pegadas, para exhibir los atributos resaltados de las cirugías. Pelo lacio suelto, y movimientos permanentes de caderas, unas más discretas que otras, depende del tamaño de la LV que no se aparta de sus hombros. La Peluche no suelta su “juca”.

Suena la música y cada cierto tiempo, la multitud corea algunas líneas de la canción: el Patrón suele elevar un dedo, mientras agarra su bragueta y la Peluche suele elevar las dos manos y uno de sus talones, batir su pelo, y mover sensualmente sus caderas.

De un lugar a otro, se mueven las “velitas”, marcan el lugar desde donde se ha pedido el 18 años o la Moët. La hielera se rellena constantemente y los vasos foam dobles con el pequeño sorbete dentro, posan en una de las manos, las cuales alternan con el iPhone último modelo! La transmisión es constante.

Son poses repetidas: Celular por encima de la cabeza y la humareda constante. Todo el escenario se consume a sí mismo, toda expectación es un Ágora en claustro. Las redes explotan, en la confirmación de que no existe Teteo sin Fronteo.

Fuente: De Patrones y Peluches – El Desahogo Dominicano (wordpress.com)

Ángel Pichardo Almonte


miércoles, 20 de julio de 2022

Ciudadanos proponen a María Teresa Cabrera como precandidata a la Presidencia y convocan a primarias progresistas

 LA EXPRESIDENTA DE LA ADP Y RECONOCIDA DIRIGENTE SOCIAL INVITA A TODAS LAS FUERZAS ALTERNATIVAS A CONSTRUIR UNA CANDIDATURA PRESIDENCIAL UNITARIA DE CARA AL 2024

Un grupo de ciudadanos y ciudadanas interesados en construir una opción política alternativa a los partidos tradicionales presentaron este miércoles a la profesora María Teresa Cabrera como precandidata presidencial de cara a la celebración de unas elecciones primarias del sector progresista.  

En un acto celebrado en las instalaciones de Casa de Teatro, en la ciudad Colonial, dirigentes sociales y ciudadanos independientes explicaron que la expresidenta de la Asociación Dominicana de Profesores (ADP) cuenta con la capacidad, la trayectoria y el reconocimiento público suficiente para ser un ente catalizador y unificador de las fuerzas progresistas y de los votantes que no se sienten identificados con el desempeño de los partidos tradicionales. 

Al asumir la propuesta, María Teresa Cabrera aseguró que está dispuesta a competir en unas primarias progresistas y a construir junto a otros aspirantes la opción que se necesita para transcender el “falso dilema” de continuismo del Gobierno o regreso del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) en sus versiones morada y verde. 

“Tenemos la responsabilidad de construir una alternativa de poder que exprese un movimiento del país y el pueblo hacia delante, y a ese propósito servirá esta precandidatura, y llamo a los demás precandidatos a hacer lo mismo”, expresó Cabrera, luego de ser presentada y ponderada por la activista Wilma Tamayo, la investigadora social Jenny Torres, y el comunicador santiaguero Ramón de Luna. 

María Teresa Cabrera llamó a que los partidos alternativos con registro electoral, sin excepción,  y que pudieran participar en la unidad que se reclama, abran sus auditorios a todos y todas los que sean precandidatos,  para que expresen en igualdad de condiciones  sus ideas y propuestas; y “construyamos así un espacio común de diversidades, en las que todos los que participemos podamos ganar el corazón y la conciencia de  las personas, y que, a fin de cuentas, sea la sociedad la que determine quién ostentará la candidatura presidencial en nombre de todos y todas”. 

La aspirante a la Presidencia de la República anunció que de inmediato iniciará un proceso de contacto y escucha con ciudadanos, ciudadanas y organizaciones sociales de todo el país, de cara a construir en colectivo la plataforma que hace falta para presentar en el 2024 una opción electoral fuerte y diferente. 

María Teresa Cabrera es una reconocida dirigente social y política dominicana, oriunda de la provincia de La Vega.  Se ha destacado en la coordinación de dos de los más importantes movimientos sociales del país, el movimiento por el 4% de la Educación y la Marcha Verde. Desde la presidencia de la ADP trabajó por la dignificación de la educación pública y la mejora de las condiciones docentes de los niños y niñas de los sectores populares. 

En la actualidad es la presidenta de la Corriente Magisterial Juan Pablo Duarte e imparte docencia a nivel universitario. 

Santo Domingo, miércoles 20 de julio del 2022.

María Teresa Cabrera precandidata presidencial.

Sin balance, es borrosa la perspectiva de la izquierda

Por César Pérez 

La conclusión de todo balance, mínimamente serio, sobre la realidad que vive el mundo actual es que vivimos un momento de generalizada y profunda crisis. Difícilmente haya un sistema político, sin importar su signo o continente donde este se encuentre que, con sus gradaciones, no dé muestra inequívoca de estar en crisis, siendo el sistema capitalista hegemonizado por los EEUU donde más sobresale esta circunstancia. También, están en esa situación los diferentes bloques existentes, articulados o no y sin importar sus regímenes políticos. Pero lo que más me abruma es la crisis de alternativas en que discurre la acción de las fuerzas político-sociales que desde diversas posiciones se reclaman del cambio.

Nunca como hoy se había presentado una situación en que el sistema capitalista, si bien conserva su dominación, no ejerce una clara hegemonía (aceptación). Son múltiples y variadas las grandes movilizaciones de protestas que en las últimas décadas se suceden en todo el mundo sin tangibles resultados, nosotros, como país, incluido. Sin embargo, nunca ha sido tan clara la debilidad de las fuerzas del cambio en su lucha contra ese sistema, y es que la complejidad del mundo hace insuficientes muchos de los asertos teóricos que les sirvieron de base, lo cual las obliga a un balance sobre porqué se ha producido esta circunstancia. Hasta el momento, por menos aquí, no hemos hecho ese balance.

En las últimas semanas el periódico Acento y AcentoTV han entrevistado a dos docenas de dirigentes de izquierda, los cuales han pasado una suerte de balance de la práctica de esta corriente, pero la reflexión ha sido esencialmente local careciendo de una necesaria y específica referencia a experiencias de otros países, para una perspectiva regional y mundial tener mayor conocimiento de nuestra realidad. Pienso que de ese balance resultará inequívoco que, en Occidente, en esta época, la vía electoral es el escenario de la lucha política, y que desde la segunda década de siglo XIX ninguna insurrección, ni ningún movimiento de protesta, por más extenso que haya sido, se ha constituido en poder.

De la constatación de ese hecho y por la complejidad del mundo actual, se ha impuesto el aserto político que indica, hasta ahora, que la democracia constituye el escenario fundamental de la lucha política, lo cual, más que antes, obliga a tener un cuerpo de ideas que en línea general definan el tipo de sociedad que se quiere. Por consiguiente, las fuerzas que asuman esa táctica de lucha como estrategia tienen que ganar lo que Antonio Gramsci llamó hegemonía, vale decir, el consenso, la aceptación de vastos y plurales sectores de la sociedad. Si no se gana el apoyo de esos sectores, difícilmente podrán disputar con éxito el poder a quienes lo detentan. Y, de lograrse, sin hegemonía la unidad será efímera y el proyecto de cambio, de instaurarse, adolecería de precaria sostenibilidad. 

En nuestro caso particular, en la búsqueda de alternativa a la situación actual a través de un bloque electoral unitario, algunos plantean que un programa sintetizaría la cuestión del tipo de sociedad que quiere y ofrece dicho bloque. En determinadas coyunturas, como es el caso, los programas unitarios con fines electorales son útiles, pero suelen ser un pliego de intenciones que recoge las posiciones sobre temas puntuales que son de interés de cada uno de los diversos sectores integrados en dicho proyecto. Un programa difícilmente pueda ser tan abarcador que logre plasmar un proyecto de sociedad, sobre todo en este momento en que resulta imposible soslayar las experiencias de cambio que se han intentado en diversos países a lo largo de la historia y eso no es tema de programa.

El abordaje de esas experiencias es clave, pues ninguna de estas ha logrado escapar a la tentación autoritaria, excluyente y negadoras de valores básicos de la democracia y en el imaginario de la gente, todo el mundo asocia la izquierda a esas experiencias, un lastre que impide a la gente calibrar en su justa dimensión el papel de la izquierda en los procesos democratizadores de sus respectivas sociedades. Con ese peso muerto, en un mundo tan complejo y exigente de los valores básicos de la democracia, difícilmente podrá construirse la hegemonía. Para que un proyecto sea realmente de cambio y sostenible, pensando en Gramsci, es indispensable ser hegemónico antes de la toma del poder.

De ahí mi insistencia en que la izquierda tiene que darse una imagen realmente democrática, lo cual significa la defensa de los valores de la democracia sin importar dónde ni el color de régimen que los limites o suprima, y hacer un balance exhaustivo de su historia, sus prácticas y sus asertos ideológico/políticos a la luz del presente. La crisis del capitalismo a nivel mundial es insoslayable y podrán presentarse coyunturas sumamente favorables para la izquierda, pero, como decía Séneca: “no hay viento favorable para el barco que no sabe adónde va”, de ahí mi insistencia en un balance para que las perspectivas de ese corriente deje de ser insosteniblemente borrosa y desmovilizadora.

Fuente: Sin balance, es borrosa la perspectiva | Acento

César Pérez


Saturno Devorando a sus Hijos


Por Grabiel Sánchez

 

Saturno Devorando a sus Hijos es una de las pinturas más conocidas de Francisco de Goya, que alude a Cronos, el dios griego del tiempo o Saturno para los romanosquien al casarse con su hermana Rea devoraba a sus hijos ante la premonición de que uno de ellos le quitaría el poder


La escena muestra un acto de canibalismo donde Saturno devora a uno de sus hijos. Esta historia fabulosa de tradición oral, nos permite realizar un símil con la historia de nuestra izquierdaen el cual el padre devora eternamente a sus hijos más destacados, para que como en la mitología griega, no le arrebaten el poder. 


Tener hijos biológicos e ideológicos es la esencia de la vida y del ejercicio de la políticaeso garantiza la supervivencia de la especie, devorarlos es sabotear la propia existencia y un camino que, ineludiblemente conducirá a la extinción, no solamente del devorado, sino también del devorador, pues no se alcanzará la continuidad históricaal menos con la naturaleza o ideología política. 


Confabularse, apandillarse e iniciar campañas sucias en contra de compañeros es el pan nuestro de cada día en las organizaciones de izquierdaSiempre ha sido una cuestión de mantener la supremacía; ese poder pequeño, lánguido, reducido y casi testimonial, pero poder al fin, en cuyo nombre se ha traicionadoha corrido sangre y se han desarticulado grandes proyectos políticos.


Recuerdo un viejo dirigente de un partido de izquierda, que alrededor de 2010 valoraba las importantes condiciones de pureza y liderazgo de otro notable líder del mismo litoral ideológicoaños después cuando luchaba con este por el control y el poder interno, hasta ladrón le llamópues para muchos la supremacía (aunque sea de una pequeña organización), justifica devorar a sus propios aliados, compañeros o a quién se coloque en medio. 


Al parecer glorifican a Nicolás Maquiavelo, al concretar con hechos que la política no debe responder a la moral sino a las leyes del poder, y que en resumidas cuentas el fin justifica los medios. Esa es una de las razones, por la cual después de más de 60 años, en la izquierda dominicana seguimos repitiendo los mismos errores y prefiriendo devorar a nuestros mejores hijos.


Los errores no solo deben verse como fracasossino, sobre todo, a modo de enseñanza pedagógica que nos impulse a reiniciar nuestras tareas con el conocimiento y la experiencia del revés como plataforma de impulso. Marx decía: "La historia ocurre dos veces: la primera vez como una gran tragedia y la segunda como una miserable farsa"​ (un cumplido a la frase original formulada por Hegel).


Finalmente, de nada sirvió a Cronos devorar a sus propios hijos, pues su sexto hijo, Zeus escondido por su madre, logró destronar a su padre y tras abrir su vientre liberó a sus hermanos logrando la victoria.


Fuente: Saturno Devorando a sus Hijos – El Desahogo Dominicano (wordpress.com)


Grabiel Sánchez


sábado, 16 de julio de 2022

Ni continuismo ni retroceso

Por Manuel Salazar

Romper el falso dilema reelección o retroceso que quieren plantar los sectores dominantes

Desde el gobierno /PRM hay un esfuerzo en plantar el continuismo como la alternativa necesaria a la posibilidad del retroceso con  cualquiera de las dos versiones del peledeísmo, leonelismo o daniliismo, y en ese interés ya hay manifestaciones del propósito de obstruir que surja una tercera opción.

Se busca imponer en la conciencia colectiva  el  dilema:   reelección del presidente Luis Abinader, o volver hacia atrás, a los gobiernos del PLD, como la cuestión en torno a la cual haya que  definirse hacia el 2024.

Hay juicios que pretenden echar culpas anticipadas sobre los que no entremos en ese dilema y nos propongamos,  como al efecto está en curso, presentar una opción  de poder diferente y diferenciada de los actuales y  los anteriores incumbentes del gobierno, si por  esa supuesta "omisión",  ocurriese un eventual regreso al poder de Leonel Fernández, o de una representación de Danilo Medina, o de una alianza nada descartable  entre estos.

Ese ardid resultó en 1982 cuando del gobierno del PRD de entonces todavía había quienes  esperaban que moviera el país hacia delante en materia de una reforma  sustancial al régimen jurídico-político.

Pero en estas circunstancias, no hay lugar para el despropósito de querer entrampar el país y pueblo en ese dilema.

Gran parte de los del país político nos propusimos contribuir a la salida del PLD del gobierno,  mediante las elecciones del 5 de  julio del 2020;  porque la permanencia de este en  el poder podría haber sumido más a la nación en una sensación de derrota histórica, irreversible durante muchos años, y era preciso crear una ambientación política optimista, de perspectivas de propósitos de avances en los planos políticos, económicos, culturales y sociales; dado que con las fuerzas propias disponibles  no nos era objetivamente posible proponernos otras salidas más ambiciosas.

Cumplimos. Contribuimos a la derrota del PLD

Ahora,  tocaría principalmente  al gobierno/PRM,  inhabilitar al  modelo de gestión pública usado por  ese partido,  comenzando por desmontar el régimen político y de cosas que lo  hizo posible;  y esto sería,  hacer más  que políticas de caridad pública y de barniz  en los  estilos de gobernar.

La concentración de la propiedad económica y del poder en las mismas pocas manos de siempre; el crecimiento económico como fin en sí mismo, aunque crezca o perviva la pobreza de las mayorías;  las privatizaciones, ahora enmascaradas en alianzas público-privadas;  el negociado en ministerios; la obsolescencia y nada democráticas de  las instituciones; la inequidad en la distribución de la riqueza; el predominio de grupos empresariales y la definición de políticas públicas para favorecerlos más y más; los cruces de intereses políticos  y económicos  intergrupales e interpartidarios,  como necesidad de la estabilidad y  continuidad de la hegemonía oligárquica,  es la esencia del régimen que debe ser superado,  y que el PLD  lo gestionó con su particular manera ventajista.

El actual gobierno lo hace de  otra manera, otro estilo, con un presidente que pone como garante su todavía límpida imagen ética, la que cuida de no dañar con prácticas onerosas ni ventajistas en el erario público.

Pero  es  la  administración del mismo régimen; reciclado de tiempo en tiempo, que constituye la problemática nacional  esencial; contra la cual nos hemos posicionado varias generaciones de revolucionarios, demócratas reales y patriotas, desde que cayó Trujillo.

Hay que repetirlo tanto como se deba o pueda, ese régimen hizo posible lo malo que hizo el PLD  en sus gobiernos; que cayera Trujillo, pero no  el trujillismo; que desapareciera Balaguer,  pero no el balaguerismo;  que la vida del país haya girado de manera rutinaria en torno a personajes que influyen mientras respiren, e incluso dejen su influencia a sus descendientes,  y a los mismos grupos económicos.

Manteniendo la esencia de ese régimen, es el gobierno/ PRM  el que hace posible el regreso de cualquiera de las versiones del PLD.  Porque si no hay cambios positivos sustanciales en la vida general del pueblo y país, la primera reacción de este, cuando evalúe su situación actual, es compararla con la más cercana hacia atrás que haya tenido.

El más de lo mismo en las cuestiones gruesas de la política y la economía, aunque se presenten barnizadas, es dar posibilidades al regreso del pele- deísmo. Se habría derrotado al PLD, pero no al peledeísmo como modelo de gobierno. Malo, por cierto.

La tarea táctica de la izquierda, superando primero la visión errática casi proverbial presente en sus componentes, de no captar el aspecto principal en cada coyuntura concreta; junto al progresismo organizado y no orgánico expresado en miles de ciudadanos y ciudadanas, que debe ser solo entendido como alternativa negadora al modelo actual; es romper el falso dilema reelección o retroceso que quieren plantar los sectores dominantes.

Es unirse en torno a un programa y una matriz ética, que expresen la superación del régimen político y al modelo económico que le da sustento material, para presentar al pueblo una opción diferente y diferenciada del actual y los anteriores gobiernos.

Fuente: Ni continuismo ni retroceso | Acento

Manuel Salazar



viernes, 15 de julio de 2022

Una efeméride olvidada

Por Rafael Chaljub Mejía

Qué doloroso. Qué pena y vergüenza debiera darnos el comprobar cómo se pierde la memoria histórica y se va apagando el sentimiento nacional.

Este doce de julio pasó sin pena y sin gloria. Aunque ese día se cumplieron noventa y ocho años de la evacuación del territorio nacional por las tropas norteamericanas, que desde el 1916 habían invadido el país y mediante una proclama suscrita por un capitán de la infantería de marina yanqui la República Dominicana queda “en estado de ocupación militar”.

Los horrores y atrocidades cometidos contra el pueblo durante aquella larga ocupación no doblegaron el espíritu de resistencia de los patriotas y la retirada de los invasores en 1924 fue ante todo resultado de la lucha patriótica.

De la resistencia heroica de aquellos que combatieron con las armas en las manos. De la sostenida y valiente lucha de opinión que, bajo el lema de la Evacuación Pura y Simple, mantuvieron los dominicanos en las calles, las tribunas, las páginas del periódico Patria que dirigió don Américo Lugo, también en el campo internacional, a pesar de los atropellos y los agravios a que los condenaban los invasores.

Aquella fue una página hermosa de la larga lucha de nuestro pueblo por su soberanía. En una época hubo aquí un movimiento en pos de declarar el doce de julio día de fiesta nacional. El Partido Comunista Dominicano fue muy militante en esa idea, pero no prosperó y la efeméride fue quedando relegada hasta llegar al extremo de que el aniversario pasa y nadie se da por enterado.

Hasta donde yo sepa y en eso hay que ser justos, tan solo el licenciado Pelegrín Castillo se ocupó de la fecha y leyó un manifiesto conmemorativo ante el Altar de la Patria.

El gobierno guardó total y condenable indiferencia, ni la Comisión de Efemérides Patrias, ni la Universidad Autónoma, ni la izquierda, que debió cumplir su compromiso frente a esa parte de nuestra memoria histórica.

En un país donde el lambonismo y la enajenación llegan tan lejos, que se ignora una fecha patria como el doce de julio, mientras se celebran como si fueran partes de nuestra cultura y nuestra identidad nacional, la fecha de la independencia de la potencia que nos invade y nos oprime, el Hallowen y el Thanks Giving Day, que nada tienen que ver con nosotros. ¡Oh, Guacanagarix, levántate y anda!

Nunca he militado en el bando del pesimismo, pero es posible que ya sea hora de empezar a cuestionarnos.

Fuente: Una efeméride olvidada (eldia.com.do)

Rafael Chaljub Mejía