martes, 15 de septiembre de 2020

HACIA UNA TRANSICIÓN DEMOCRÁTICA

 Por: Guillermo Moreno

Con el ajusticiamiento de Trujillo, el 30 de mayo de 1961, se inicia el proceso de transición hacia la democracia. El primer ensayo se produce con la elección del profesor Juan Bosch y la adopción de una Constitución profundamente democrática. El gobierno de Bosch, como conocemos, apenas duró 7 meses. La oligarquía, una facción de las Fuerzas Armadas, con el concurso norteamericano le pusieron fin, instaurando el gobierno de facto del Triunvirato.

El país cayó en una deriva que dio lugar al levantamiento armado del movimiento 1J4, liderado por Manolo Tavárez Justo, en 1963; al estallido de la guerra civil de 1965; la segunda intervención norteamericana y la instalación del gobierno autoritario de Joaquín Balaguer. El retorno de éste al poder en 1966, permaneciendo por 12 años, a base de privación de los derechos y libertades democráticas, asesinato de opositores, fraudes electorales, significó un retroceso hacia las viejas prácticas de la dictadura trujillista de la que él había sido un actor en primer plano.

En 1978, 15 años después del golpe de Estado, las fuerzas democráticas del país se articularon alrededor del candidato del perredé y, con el apoyo mayoritario del pueblo dominicano, le dieron fin al gobierno autoritario de Joaquín Balaguer. Las primeras señales de este gobierno fueron el inicio de una nueva transición democrática, pues se liberó a los presos políticos, regresaron los exilados y hubo un clima de mayor respeto de las libertades.

A pesar de ello, en sus 8 años de gobierno, el perredé reprodujo prácticas antidemocráticas, se cometieron graves actos de corrup- ción, además de ser responsable de la muerte de cientos de personas en la poblada de abril de 1984. En ese escenario, Joaquín Balaguer capitaliza la oposición política y retoma el poder en 1986 y gobierna por otros 10 años.

En el año 1996 asciende al poder el peledé, y aunque fue con el apoyo de Balaguer, esa alianza, para una parte de la población, había sido táctica, por lo que se mantuvo la esperanza de que una vez en el poder, el partido de Bosch realizara su proyecto de liberación nacional, su propuesta anticorrupción y retomara el proceso de transición democrático que había quedado trunco, décadas atrás.

La traición a sí mismo y al pueblo dominicano hecha por el peledé, en los tres gobiernos de Leonel Fernández y los dos de Danilo Medina, es tan reciente que parecería innecesario relatarla. El peledé se convirtió en un partido Estado y su comité político se superpuso, como suprapoder extraconstitucional, a los poderes del Estado. Era, en este órgano partidario, donde se decidían muchos de los asuntos que luego se llevaban a legalizar al Congreso Nacional y al Poder Judicial. A la Constitución se le trató como un pedazo de papel y se le modificó cuantas veces la apetencia de poder así lo requirió. En los gobiernos peledeístas se despojó al Estado de su patrimonio, se entregaron los recursos naturales, se depredó el medio ambiente y se endeudó el país a niveles nunca alcanzados. Los gobiernos peledeístas se caracterizan por los más espectaculares actos de corrupción. El peledé se reprodujo en el poder con base en el fraude electoral y una amplia estructura clientelar desarrollada principalmente a través de asistencia social del Estado.

En las elecciones del 5 de julio, Luis Abinader y el perreeme sacaron al peledé del poder, poniéndole fin al régimen político que durante 20 años había instaurado. Igual que lo hecho por el perredé con el régimen político de Joaquín Balaguer de los 12 años.

Lo que está por verse es si se repite aquélla historia o si Luis Abinader y el perreeme, el amplio poder que la ciudadanía ha puesto en sus manos, lo utilizan para retomar y dar continuidad a la varias veces truncada transición democrática, en estos últimos 59 años.

Lo primero es hacer un gobierno medularmente honesto que maneje con pulcritud, transparencia y de forma austera los recursos públicos.

El impulso de la transición democrática exigirá, principalmente del liderazgo del perreeme, garantizar la separación e independencia de los poderes del Estado, el respeto de la institucionalidad y la plena vigencia del Estado de derechos y libertades.

El tránsito hacia la democracia requiere de un legislador distinto a la horda peledeísta: uno que tenga conciencia de ejercer su función de fiscalizar al Poder Ejecutivo, representar a la ciudadanía, concentrarse en legislar, renunciado a las prácticas peledeístas de ver la función legislativa como sinónimo de barrilito, cofrecito, exoneraciones y tráfico de influencias.

La transición democrática requiere de una firme voluntad para acabar con la impunidad, investigar y perseguir penalmente a los corruptos, no solo de Danilo Medina, sino también la de los gobiernos de Leonel Fernández, llevar los culpables a la cárcel y recuperar lo robado.

La transición democrática requiere darles vigencia a los derechos económicos y sociales de la ciudadanía, la defensa del medio ambiente, de nuestros recursos naturales y de nuestra independencia y soberanía nacional.

Serán los hechos de los próximos meses y años los que revelarán si continuaremos o no en esta ficción democrática.

Fuente: https://www.diariolibre.com/opinion/en-directo/hacia-una-transicion-democratica-JH21408551?fbclid=IwAR0orUcb5nDNFT8rSlY4wTsX2AaN0QdYxkoZT_s4ZuAj8SciE0QQWUVTjcU



 

 

sábado, 12 de septiembre de 2020

ENDEREZAR LO TORCIDO

 Por: Fortune Modeste valerio 

Cuando observo el panorama político nacional, la voz y acciones de los revolucionarios no se sienten, sin ningún impacto. A pesar de su precaria organización, su división y dispersión, lo complica todo.

Continuar por los senderos de la división y dispersión, no conduce a nada positivo. Es seguir friéndose en la misma salsa y después culpar a otros por el aceite muy caliente. Los revolucionarios deben admitir su debilidad organizativa, escasa incidencia en la población; y, tomar el cielo por asalto, articulando una entidad política unitaria para enfrentar los grandes desafíos. 

No estamos hablando de fusión ni nada parecido. Es unidad de acción de los revolucionarios para que las acciones lleguen con contundencia, coherencia y en búsqueda, en los frentes de masas y otros escenarios, de alcanzar un objetivo común. Si se quieres, es la puerta de entrada que materialice una fuerza monolítica capaz de aplicar el principio de unidad, crítica y unidad, que sepulte lo que nos tienen separados por décadas, como la res mala. 

No deben alegar, darle vuelta al asunto, primero hay que “discutir” el programa para transformar la sociedad dominicana. Objetivo estratégico que nadie resta importancia capital para llegar a un puerto seguro. De lo que se trata es dar los primeros pasos, en serios, analizar el nuevo escenario, si es que existe, y cómo enfrentar las ejecutorias del presente gobierno que preside Luis Abinader Corona. 

Cada quien por su lado, seguimos en más de lo mismo, sin conseguir victorias tangibles que le sirva a un proyecto común y que permita alcanzar escalones de poder. Aquí, todos tienen sus objetivos personales, grupales y partidarios; pero nada, fruto de un acuerdo consensuado entre las principales entidades revolucionarias. 

Cuando se tiene el criterio de que la organización política es una finquita de su propiedad, muy bien disimilada, se obstaculiza el asunto. Nadie quiere soltar, de golpe y porrazo, lo que ha sido su vida por largo tiempo. Es justo admitir, reconocer, que existen organizaciones, dirigentes y militantes que se esfuerzan por la unidad, y trabajan por ella. 

Para poder enfrentar con éxitos los desafíos y las maniobras del presente gobierno del presidente Luis Abinader, el PRM y fuerzas aliadas, se requiere la formación de una entidad unitaria que pueda sacar provecho visible a las grandes jornadas de luchas que se avecinan. Es cierto que salimos del PLD corrupto, ahora nos toca bailar pegao con una pareja que de antemano sabíamos que tenía su musiquita, sello de clase, por dentro.

—Es una necedad negar la existencia de un cambio de gobierno, una nueva forma de gobernar, lo que está por verse es la transición democrática. 

El programa de gobierno presentado a la población garantiza, en el marco institucional, institucionalidad democrática y una nueva forma de gobernar que hay que aprovechar. Sus distorsiones en aplicar algunas medidas gubernamentales, en a penas 27 días, benefician de manera descaradas a clanes familiares y a un sector de clase que se quiere servir con la cucharada grande, en la cara, muerto de risas, de todos.

—Lo reitero de nuevo: nada caerá del cielo, por obra y gracia del Espíritu Santo. Sin unidad, lucha organizada y bien dirigida, ta’ mos presos por la guardia de Mon. 

La táctica de unir la mayor cantidad de fuerzas políticas para vencer al blanco común fue correcta. Sino hay unidad, de las organizaciones revolucionarias, y enfrentar con éxitos los desafíos, el traje quedará a media talla. El traje completo y a la medida se los hacen los que actúan sobre la base de objetivos comunes y acciones coherentes. 

—Las alianzas público y privadas, son los ejemplos de una  burguesía en expansión y crecimiento, bajo la sombra del Estado. 

Seguir por ese camino torcido no es correcto. El tiempo es inexorable, no lo detiene nadie. Y no debemos continuar por ese derrotero. Se podrán alcanzar éxitos en forma partidaria, pero la revolución en sentido general avanza muy poco, imperceptible. El enemigo de clase actúa con coherencia y se consolida en el poder, al no tener una oposición revolucionaria unitaria, con inteligencia y los pies sobre la tierra, que desenmascare sus verdaderas intenciones, cuando empiece a torcerse.



VENEZUELA, EL INDULTO Y LAS ELECCIONES

Por: Rafael Chaljub Mejía

El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro Moro, ha indultado a más de un centenar de opositores procesados por la justicia de ese país. todo un acto de generosidad, y reconciliación que, de paso, contribuye a crear un clima más propicio para la celebración de las elecciones del seis de diciembre próximo.

En la lista de los indultados hay elementos comprometidos en actividades de franca sedición, pasando por algunos que, en abierta traición a la patria, claman por el golpe de estado, el magnicidio y la intervención de tropas extranjeras, hasta delincuentes comunes responsables directos de actos incendiarios, atentados contra la propiedad estatal, y muertes de agentes de la fuerza pública.

A riesgo de defraudar a parte del pueblo venezolano que reclama justicia contra gente comprometida en ese tipo de acción, el presidente Maduro ha tomado una decisión valiente, sabia y justa.

Ante ese gesto la oposición se ha dividido. Algunos, como Capriles, se muestran dispuestos a concurrir a las elecciones, mientras otros, como el inefable Juan Guaidó lo rechazan todo, se niegan a ir a unas elecciones a las cuales el gobierno venezolano ha invitado a la Unión Europea y a la ONU a que envíen sus observadores respectivos.

En verdad el rechazo de Juan Guaidó no cambia nada. Un presidente autoproclamado, que obtenga un título que no está consignado en ningún texto de la Constitución vigente, sin poder de hacer cumplir ninguna de sus decisiones en suelo venezolano y que tiene que confiar su suerte a que la mano imperialista lo sostenga y lo ponga en el poder.

Así Guaidó y su gente reconocen su impotencia, dejan dicho que buscan el poder por la violencia, igual a propugnar por un baño de sangre en Venezuela. Ese sector opositor responde a la vocación entreguista y ultra reaccionaria de lo más rancio de la oligarquía venezolana, cuya desenfrenada hostilidad viene desde los tiempos del comandante Hugo Chávez, al que jamás le perdonaron que le arrebatara en base al voto popular, el control de las riquezas de ese gran país.

A esa desaforada oligarquía el comandante le advirtió algo que bien cabe recordárselo ahora a Juan Guaidó: Esta es una revolución democrática y pacífica, pero armada, dijo Chávez. Si la vía democrática de las elecciones está ahí, ¿por qué no transitarla? en vez de jugar con fuego o, como se dice aquí, andar dejando camino real por vereda.

Fuente: https://eldia.com.do/venezuela-el-indulto-y-las-elecciones/



 


viernes, 11 de septiembre de 2020

MANUEL SALAZAR: OPINIONES CON ACENTO


 

Presentación 

Estas son opiniones, en el sentido estricto. Son juicios que cuando aparecieron cada semana en el periódico ACENTO estuvieron sujetos a la controversia; sobre lo que fue el discurrir político hasta 5 de julio de 2020, día en que se celebraron las elecciones nacionales, y que marcó el cierre de la coyuntura electoral. Pero además, sugieren las banderas democráticas de lucha a considerar una vez logrado el cambio de gobierno.

Consideran la perspectiva de sentar las bases para una nueva transición democrática en el país de cuyas cualidades se presentan algunos elementos, en el período que se abre con a llegada del PRM y la Coalición Democrática al gobierno y a una mayoría importante en el Congreso.

La coyuntura pasó y estas opiniones podrían considerarse como simples testimonios, sin ninguna importancia práctica. Pero no. El interés de las mismas, y que justifica esta publicación, queda determinado precisamente porque expresan el seguimiento al día a día a una coyuntura, que es, o debe ser, un método de trabajo habitual en cualquier agrupación política cualquiera que sea su signo ideológico.

La coyuntura es la realidad en movimiento, y es la que proporciona los datos para la toma de posicionamientos dentro de la misma, y prever el curso futuro deseable.

La que culminó el pasado 5 de julio del 2020, fue la coyuntura electoral más compleja desde 1962; por la diversidad de elementos en juego. Procesos internos complicados al interior de todos los partidos fundamentales; incertidumbre en estos, dada por las señales confusas que a veces expresaban algunos de sus actores principales. Normativas nuevas, casos de la ley de partidos y las primarias.

Y la posibilidad latente, que al final se hizo realidad, de la ruptura en la forma de la hegemonía político y social que moduló durante casi 20 años en la competencia entre el Leonelismo y el Danilismo que, en alguna medida, se constituyó en la competencia “bipartidista” dentro del mismo PLD, y dio racionalidad al régimen a partir del colapso del PRD y del hundimiento histórico del Partido Reformista Socialcristiano.

La coyuntura tardó casi tres años en configurarse como tal. Mientras, solo se percibían elementos difusos. Y, si se quiere, el seguimiento en busca de articular un propósito político, el del cambio; semejaba a la labor de un orfebre uniendo hilos que parecieran esenciales. O de orfebres, porque en realidad fueron muchas y muchos los que cada día se empeñaban en hacer un diagnóstico y construir sobre el mismo una propuesta política que diera al traste con el gobierno del PLD. 

Derrotar al PLD, apareció temprano ante muchos como una premisa necesaria en interés de habilitar el país para otros cambios políticos más significativos. La unidad amplia de muchos sectores políticos y sociales fue construida de menos a más; también considerada imprescindible a ese propósito. De menos a más, porque en lo fundamental hubo de sobreponerse a muchas ideas tangentes, casi aventureras; que acariciaron la idea de armar varios polos opositores y dispersar las fuerzas que solo en comunión podían derrotar al oficialismo. 

Con cuáles ideas y cómo articular esa unidad, era una cuestión esencial y las respuestas eran un mar diverso. La unidad que terminó sepultando al PLD fue construida con muchas opiniones expresadas día a día.

Si bien el PRM y su candidato presidencial, Luis Abinader, aparecieron siempre como los principales contendores al PLD, la derrota electoral de este fue construida en discusiones abiertas con la participación de personas provenientes de litorales diferentes. 

Las de esta publicación, que aparecieron en el periódico ACENTO, fueron parte del propósito de muchos de unir para derrotar al PLD como premisa importante para continuar la lucha por más calidad democrática; jamás como fin en sí mismo; ni mucho menos transando con ideas y prácticas conservadoras presentes en el partido que lideró la coalición por el cambio.

Así las cosas, estas Opiniones con acento, expresan parte de lo que pasó en la coyuntura que cerró el pasado 5 de julio del corriente año. Pero también dicen algo del contenido y la forma de la lucha que sigue en lo adelante.

Porque la lucha sigue, en unidad, diferenciación y crítica.

M. Salazar

Agosto, 2020.




miércoles, 9 de septiembre de 2020

COINCIDO CON EL PAPA FRANCISCO, "EL CHISMOSO Y EL MENTIROSO SON HERMANOS GEMELOS, Y POR TANTO MERECEN IGUAL TRATO"

Por: Ramón Antonio Veras.

1.- Desde siempre se ha discutido si la conducta de la especie humana está influenciada por lo biológico o genético, o por las condiciones ambientales, principalmente socioculturales, o por ambos factores a la vez. En lo que no hay discusión es que, en cada medio social, esa conducta está conformada por los actos que habitualmente ejecuta una persona.
2.- Apartándonos de la influencia de lo biológico o lo social en la forma de proceder los seres humanos, el ordenamiento económico que predomina en nuestro país genera, en la conducta de los dominicanos y dominicanas, toda una serie de vicios que se observan como habituales.
3.- La rutina en la ejecución de algunos actos evidencia en muchos miembros de la comunidad dominicana una especie de adición a los mismos; uno de esos vicios frecuentes es la mentira que está como una dependencia, se hace uso de ella con una espontaneidad que prueba la naturalidad, la familiaridad a su uso en quien la ejecuta.
4.- La mentira está tan ligada a algunas personas que las convierten en adictas a su manejo; la consideran como un soporte, un pilar de su modo de vida y sin el cual no pueden manejarse en sus relaciones con los demás. Mentir viene a ser, para el que cultiva la mentira, una especie de cualidad virtuosa.
5.- Aquel que se aclimata a practicar la mentira se capacita para utilizarla tanto que la adecúa a su forma de ser, procurando acreditarla dándole valor de confianza absoluta a lo que en ella se ha fundamentado; el mentiroso busca que su mentira adquiera categoría de documento auténtico.
6.- El que profesa la mentira llega a cultivarla en un grado tal que la abraza como una religión; llega a tenerla como una doctrina para sus relaciones, de su accionar en el medio donde vive; la reconoce como si fuera un don divino, y su convicción por ella no tiene límites.
II.- La mentira dañina
7.- Mientras la mentira es utilizada por quien la practica como un simple medio de persuasión y penetración, no lesiona; basta con tomarla como un simple vicio de su portador. Pero ocurre que el artífice de la mentira no se limita a usarla para cosas triviales, sino que también la usa para dañar, herir, fastidiar y de cualquier forma perjudicar a otros.
8.- Una vez el profesional de la mentira decide hacerla dañina, se convierte en algo peligroso; en alguien capaz de hacerle la vida imposible a todo aquel que no es de su agrado, sin importar el nivel de daño que produzca la mentira empleada como arma de destrucción de honras, virtudes y méritos, hace efectos dañinos como si fuera un producto tóxico, letal por simple respiración a la distancia, con la agravante de que la mentira diseñada para afectar a terceros siempre está acompañada de los más diversos componentes generados por cerebros perniciosos.
9.- El mentiroso para su misión dañina hace un estudio minucioso de cómo difundir el veneno, con el que rodeará sus argumentos lesivos, la profundidad y sistematización de su falsedad y cuando considera concluido su objetivo nocivo. Mientras más ponzoñosas sean sus mentiras, más bien se siente el falseador; lo ultrajante desempeña una función fina contra quien la mentira deshonra y mancilla a quien goza de aprecio.
10.- Por lo regular el mentiroso se expresa en forma pausada para que su falso mensaje llegue en forma nítida a su interlocutor; procura adornar su elocuencia a los fines de llamar la atención, y que su vocablo sea apreciado como sincero; se esmera por utilizar palabras que cuadren perfectamente con la idea que desea vender y que sea fácil de asimilar; mientras más incorpora sus falsedades al cerebro del público con más rapidez logra el mentiroso el fin que persigue.
11.- En el desarrollo de sus ideas dañinas, el mentiroso no quiere ser interrumpido; se molesta cuando es interferido por alguien; quiere tener cautivo de su conversación a quien ha escogido para que reciba la aviesa versión que tiene contra la persona que ha decidido ofender con sus maquinaciones; no quiere que su conspiración nadie la obstaculice para que su falacia pueda calar con más profundidad.
12.- El calumniador se siente triunfador cuando la bola se ha propagado ampliamente, y más aún si ha llegado a penetrar a los círculos más cercanos e íntimos del difamado; el falsario celebra en grande cuando su opinión malsana tiene asidero; si es aceptada como cierta con relación a aquel contra quien va dirigida.
III.- Comportamiento del mentiroso
13.- La sinuosidad del mentiroso se revela en su forma de penetración antes de lanzar su mentira, primero analiza el ambiente y a los presentes; poco a poco va introduciéndose, y luego suelta las palabras con las cuales busca desdeñar, vilipendiar a quien quiere infamar.
14.- En su glosario de palabras para dañar, el mentiroso no hace uso de la mentira químicamente pura, por lo que hay que tener cuidado con el componente que utiliza que puede exhibirlo muy fino, con gran elegancia, aunque en el fondo siempre será su arma predilecta el cuento, la bola, el embuste, la trola, la falsedad, la patraña, el artificio y la fábula; metiendo chivos, haciendo cuentos para confundir.
15.- Aquella persona a quien el mentiroso decide lesionar, puede decir que le ha caído encima la peor maldición cargada de villanía, calumnias, anatemas y ofensas; la bajeza hecha persona es lo que el mentiroso busca que se crea el que es su víctima. La iniquidad es una de las armas del embustero.
16.- El mentiroso mancha reputaciones y para tal fin elabora una especie de libreto en el cual diseña su plan de acción enfocado en el descrédito bien diseminado; un amplio baldón que alcance totalmente al difamado; combina falsedades para penetrar con supuestos hechos de deshonor y deshonra, y cuando ha mancillado plenamente al infamado, entonces el engañoso respira hondo diciendo “misión cumplida”.
17.- El farsante jamás hace uso de la verdad porque la considera su enemiga principal; sus aliados diabólicos son el infundio adornado; la patraña expuesta con elegancia aprendida; la malicia presentada con cara angelical; el descaro desarrollado con donaire para influir y dañar por completo; la hipocresía identificada como supuesta virtud; el fingimiento dibujado como algo habilidoso; la sutileza exhibida con grado de finura intelectual; la triquiñuela elevada a una gracia del espíritu. La camándula la tiene el mentiroso como medio de destrucción de honras escogidas.
IV.- El mentiroso y sus ejecutorias
18.- El que utiliza la mentira en forma habitual la tiene como algo muy especial de su vida. Con el transcurso del tiempo hace de ella su aliada incondicional, sin la cual cree no puede tener existencia; la convierte en un símbolo, le rinde culto, le profesa veneración y le rinde homenaje. El mentiroso considera la mentira como aquello que le hace posible su estancia en el planeta tierra, porque está educado para mentir, instruido para dañar, adoctrinado para fastidiar, deshonrar y causar pesares a seres humanos de buenos sentimientos.
19.- Para cualquier persona que quiera defenderse de las acciones malignas del mentiroso, es bueno que sepa que él puede ser identificado como malvado, embustero, perverso, engañoso, infame, trolero, protervo, malicioso, depravado, diabólico, embaucador, cuentista nefasto y enredador despreciable.
20.- Como disociador por excelencia, el mentiroso procura sembrar cizaña entre personas que se guardan afecto mutuo; él se la ingenia para convertir el cariño y estima, en odio y antipatía; los aliados los hace adversarios, donde impera la armonía siembra la discordia, hace aflorar la discrepancia, la disensión, la rencilla y la desavenencia, allí donde reina la concordia y la comprensión.
21.- Con su arma venenosa, la mentira, el embustero, para desunir y crear conflictos entre amigos, socios y familiares, comienza lanzando especies que generan discrepancias, disconformidad y duda, con el objetivo de promover discusión, pugnas y rebatiñas, hasta llegar a la desunión; allí donde existe acoplamiento y firme conexión, el mentiroso hace labor en procura de la desintegración; donde hay alianza sincera lucha por escindirla.
22.- El mentiroso, en su accionar no se mantiene siempre igual; cambia conforme su conveniencia; se presenta de diferentes maneras para no ser ubicado en sus actuaciones; su versatilidad es una de las cualidades que le permiten pasar desapercibido, se hace el ingenuo porque así a su versión le da credibilidad; lanza su especie mentirosa y se queda como un despistado.
23.- Ante el ataque artero del mentiroso, su víctima, alarmada por el infundio utilizado en su contra en forma sorpresiva, queda desarmada; el desaliento la domina; en su cabeza no cabe la infamia que el embustero ha puesto a circular. Reducir a la persona, hacerla sentir mal, es un objetivo del farsante, que busca generar tristeza, angustia y pena, hasta llegar a la infelicidad.
24.- En su misión de hacer labor dañina, el que con la mentira deshonra, no distingue; poco le importa injuriar al familiar, al amigo, colega, camarada, conocido o vecino; un niño o un adulto, un hombre o mujer. Su objetivo es propagar la invectiva hasta hundir a su víctima. Se comporta infatigable, dinámico mientras infecta y contagia con su mentira, su habladuría.
Reflexiones
a) No siempre, históricamente, el ser humano abrazó la mentira como formando parte de su cultura; por tanto, ha de llegar una etapa del desarrollo social de las fuerzas productivas, en la cual la especie humana estará liberada espiritualmente de toda clase de vicios sociales y, entre ellos, de la mentira.
b) En la medida que una sociedad se deteriora, más vigencia tiene el que hace uso habitual de la mentira; los vicios sociales nacen y se desarrollan en ambientes donde la mediocridad sobresale, de ahí que en nuestro país los farsantes mentirosos abundan.
c) En la actualidad, como vicio social, la mentira está presente en todas las clases, capas y sectores de la sociedad; existe como algo sociocultural que ha infectado a todo el tejido social dominicano.
d) El mentiroso tiene sus iguales: es hermano gemelo del sinvergüenza, primo directo del traidor y sobrino del intrigante; esta familia tiene en común que se amamanta de la mentira y no sirve ninguno de sus miembros.
e) Hasta tanto la sociedad no se libere de la epidemia de la mentira y su más fiel intérprete que es el mentiroso, los sufrimientos en los seres humanos siempre serán una posibilidad latente, porque nadie está fuera del alcance de quien acecha al que sirve para causarle sinsabores y pesares.
f) La mentira es tan dañina que lesiona al que la dice, al que la escucha y a quien la difunde; y su efecto dañoso se extiende a todos aquellos que ingenuamente dan crédito a la mentira propagada que contamina a los crédulos.
Santiago de los Caballeros,
8 de septiembre de 2020.



sábado, 5 de septiembre de 2020

EGIPTO DESPUÉS DE LAS SIETES PLAGAS

 Por: Rafael Chaljub Mejía

Recordarán los compañeros del Congreso Cívico, que en las actividades de campaña que ese movimiento organizaba junto a la Coalición Democrática, decía yo con frecuencia en mis discursos, que cuando el peledeísmo saliera del poder, dejaría el país igual a como quedó Egipto después de las siete plagas de la leyenda bíblica.

Desgraciadamente acerté en mis predicciones y aquí está el panorama que el presidente Luis Abinader y su gobierno han heredado.

Un país endeudado hasta el extremo de que ya casi las dos terceras partes del Producto Interno Bruto están comprometidas con los compromisos de la deuda externa.

Casi todos los viejos males agravados, un Estado escaso de recursos, una institucionalidad en quiebra, y como marco general de todos esos problemas, dos factores difíciles de medir en su verdadera magnitud: La pandemia del coronavirus que azota implacablemente a la población y una crisis moral que ya conspira seriamente contra las posibilidades de supervivencia de los valores que forjó nuestro pueblo a lo largo de su propia historia.

Lo peor es que, como pandemia al fin, la solidaridad internacional se ve limitada porque cada país tiene como prioridad luchar contra ella en su propio territorio. Por eso y entre paréntesis, tiene tanto valor la actitud de Cuba, que, además de cumplir con su deber primordial de proteger su propio pueblo, ayuda con singular desprendimiento a otros países.

La situación de la República, su gobierno y principalmente su pueblo, es muy difícil y el presidente Abinader tendrá que hacer del combate a la pandemia su principal tarea. Con tantos problemas sociales pendientes y tantas demandas justas insatisfechas.

En cuanto a la plaga del saqueo de los fondos públicos, las consecuencias no pueden ser peores. Ese vicio, causa eficiente de la bancarrota política del pasado gobierno, mantiene al país bajo conmoción, mientras más se conocen los desastres que el caballo de Atila de la corrupción ha dejado a su paso.

Gracias que la conciencia moral de la nación pudo preservarse, pero el daño ha sido tan profundo, que para repararlo debidamente, se necesitará de una firme voluntad de hacer justicia y del carácter del presidente para poner los debidos ejemplos cuando la plaga de esa corrupción amenace con sacar la ponzoña en el nuevo gobierno. El presidente ha prometido esa actitud y ojalá le haga al país el gran servicio de cumplir con su palabra.

Fuente: https://eldia.com.do/egipto-despues-de-las-siete-plagas/



viernes, 4 de septiembre de 2020

EE.UU. Y COLOMBIA ACTIVAN NUEVO PLAN DE AGRESIÓN A VENEZUELA

Por: Narciso Isa Conde

En medio de sus respectivas crisis internas, EE.UU y Colombia están activando  una nueva agresión contra el proceso bolivariano de Venezuela, procurando arrastrar a Brasil a esa aventura. Colombia es la plataforma en la que se apoyan una parte de los factores agresivos y EEUU es el agresor mayor, ambos componentes estrechamente conectados con la ultraderecha venezolana.

En la urgencia de esta iniciativa ominosa influyen tanto la  cada vez más difícil determinación imperialista de revertir la soberanía conquistada por el pueblo venezolana,  como  los grandes obstáculos que gravitan contra el neofascismo hegemónico en  los dos países promotores del nuevo plan y  que afectan además a la propia derecha mafiosa encabezada por Juan Guaidó.

Bastante desesperación está presente en esta nueva amenaza.

   ADVERSIDADES  QUE AFECTAN A LOS CONJURADOS

Las elecciones estadounidenses están fijadas para noviembre y los comicios parlamentarios de Venezuela para el 6 de diciembre.

La facción  fascistoide que representa Trump está en apuros: Biden actualmente tiene una ventaja de 10%., lo que la empuja a intentar la utilización de una posible intervención contra Venezuela como factor electoral.

Al mismo tiempo el uribismo está sometido a una fuerte presión interna en Colombia, pagando las consecuencias  tanto de su traición a importantes capos paramilitares (ex –aliados, ex -socios)  como  el actual baño de sangre ejecutado por el Gobierno de Iván Duque, pupilo de Álvaro Uribe Vélez.

Mancuso, una especie de “capo de tuti capi”, luego de ser extraditado y de negociar su libertad con las autoridades estadounidenses, ha hecho revelaciones que implican al ex-presidente colombiano en masacres espeluznantes. Uribe está actualmente en prisión domiciliaria y a punto de ser procesado judicialmente. Algunas de esas revelaciones son extensivas  también al ex -presidente Juan Manuel Santos, jefe político de la facción oligárquica.

En tales condiciones la agresividad del narco-estado terrorista colombiano contra la Venezuela bolivariana juega un papel diversionista o de distracción de primer orden, estimulante de un  híper-chauvinismo.

Por su parte, la derecha venezolana, dividida en torno a la intervención gringa, tiene las elecciones parlamentarias perdidas. Su facción menos radical ha decidido participar en los comicios, mientras el bando neofascista aliado a Trump, Duque y Bolsonaro ha decidido boicotear las elecciones y favorecer la desestabilización violenta y una eventual intervención militar conjunta.

Todos los partidos de la derecha tradicional y de la nueva derecha se han dividido, quedando sus respectivos registros electorales en manos de las facciones mayoritarias que decidieron participar en las elecciones de diciembre.

El neofascismo está optando por el caos, por la militarización de la política y la comunicación, y por el desorden… como componentes relevantes de una guerra integral y multifacética.

La reciente denuncia formulada por Samuel Moncada, embajador venezolano ante la ONU, advierte sobre esa posibilidad.

                    COMPONENTES DEL PLAN

El plan consta de 8 componentes:

-Tratar de acorralar a Rusia, forzándola a concentrar su accionar militar contra la desestabilización de Bielorrusia, descuidando el tema venezolano.

-Reforzar el cerco mediático contra el chavismo: falsas noticias, ataque a Telesur, retiro de Direct TV, ocultamiento y control sobre todas las plataformas noticiosas.

-Fuerte apoyo  a derecha neo-fascista en su ruta contra las elecciones de diciembre: conspiraciones, disturbios, terrorismo paramilitar…

– Mayor agresividad del régimen colombiano, iniciada con la falsa denuncia de Duque sobre la supuesta adquisición de cohetes iraníes de largo alcance por el gobierno del Presidente Maduro, con la que se pretende activar el contra-ataque colombiano-brasileño.

-La desaparición de Carlos Lanz, quien oportunamente denunció y describió las características de este plan.

– Presentar a Venezuela como exportadora de la COVID 19 hacia los países fronterizos, cuando es totalmente a la inversa; lo que persigue usar la pandemia como pretexto de una intervención para controlar la crisis sanitaria.

-Estimular todo malestar social o inventarlo si fuera necesario.

–  Y, finalmente, la “Sorpresa de octubre”, que equivale a la agresión mayor con  un fuerte componente militar.

 El halcón Eliot Abraham tiene a su cargo la dirección política de ese plan, que obliga a reforzar a escala continental y mundial la defensa del proceso bolivariano.

UNA COSA PIENSA EL BURRO…

Ese es el cálculo imperialista, pero la realidad no favorece como ellos piensan sus macabras pretensiones.

Venezuela tiene fuerza militar y fuerza popular para enfrentar esa y otros tipo de agresiones.

Tiene respaldo político-militar de Rusia, China, Irán, Cuba.

Tiene pueblos hermanos que pueden contribuir a enfrentar a los agresores.

Tiene una firmeza y una voluntad de vencer que mueve montañas, mientras el Norte Revuelto y Brutal, en franca decadencia, atraviesa por la peor crisis interna de su historia reciente; capaz de sumar múltiples  y potentes rebeldías activas y soterradas, como lo revelan los recientes levantamientos de la negritud oprimida y criminalizada.