miércoles, 20 de mayo de 2020

UNA IMPERDONABLE OFENSA DE KABITO GAUTREAUX A LA MEMORIA DEL CORONEL RAFAEL TOMÁS FERNÁNDEZ DOMÍNGUEZ


"...y aquí estoy, respondiendo con la frente en alto, el honor multiplicado y la vergüenza como estandarte. Que me juzgue la Historia y la República". Coronel Fernández Domínguez

Por: Fidel Soto

¿Por qué regresó en un avión de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos el Coronel Fernández Domínguez el 15 de mayo del 1965?

En vista de que la triunfante insurrección militar y popular fue detenida por la intervención militar norteamericana, quedando solo un reducto de resistencia  en la zona colonial por la descomunal embestida efectuada por las fuerzas de San Isidro, cuando  el Pentágono organizó y equipó a unas tropas que estaban vencidas y en desbandada iniciando la criminal Operación Limpieza.

Embotellada la revolución, la única salida posible era la de una negociación con los interventores a la que ellos a regañadientes se vieron obligados a aceptar, porque su interés primordial era el exterminio de las fuerzas constitucionalistas que por el escándalo internacional, por el apoyo recibido en el mundo y por la firme determinación de los insurgentes y el pueblo no pudieron realizar.

Bosch, en su obligado exilio en Puerto Rico, sostenía las conversaciones y negociaciones con el poder norteamericano y sus representantes: Abe Fortas, McGeorge Bundy, Cyrus Vance, Harry Shlaudeman y con la "mediación" de Jaime Benítez, rector de la Universidad de Puerto Rico y del gobernador Luis Muñoz Marín.

Acordado el plan conocido como  "La Fórmula Guzmán", el presidente  convence al coronel Fernández para que le explique al coronel Caamaño los pormenores de dicha negociación y que tenía que ser de manera personal por lo que Bosch logró que los norteamericanos trajeran en un avión militar a Fernández y al coronel español Herrera Marín. Ante la negativa de Fernández de regresar en un transporte de los Yanquis, el presidente Bosch le dice: " Si usted puede utilizar las armas del enemigo para derrotarlo, ¿se negaría a hacerlo? Respondiendo Fernández: "Está bien señor, ¿a qué hora es la salida?

Pero el gran Comandante de la revolución de abril, el más documentado, el más valiente, la más alta autoridad del sector constitucionalista, el señor Kabito Gautreaux a los 52 años de ese acontecimiento declara en un artículo publicado en el periódico El Nacional de fecha 25 de abril del 2017 "que el coronel Fernández Domínguez vino al país en medio de la revolución, enviado por el entonces presidente de Estados Unidos, Lindon B. Jhonson".

Así Kabito, denigra, difama y ofende el alma inmaculada del organizador y jefe del Movimiento Constitucionalista, en golpe de carambola contra el presidente Bosch.

Hoy las palabras de Fernández golpean el rostro de Kabito: "...y aquí estoy, respondiendo con la frente en alto, el honor multiplicado y la vergüenza como estandarte.

"...Que me juzguen la Historia y la República".