martes, 30 de noviembre de 2021

ELECCIONES PRESIDENCIALES EN HONDURAS: XIOMARA CASTRO INAUGURA UNA NUEVA ERA

Por Atilio A. Boron

La aplastante victoria de Xiomara Castro en las elecciones presidenciales de Honduras pone un broche de oro a un mes políticamente excepcional de Nuestra América. 

Queda aún pendiente el balotaje chileno, pero el triunfo de la candidata de LIBRE tiene un relieve y una trascendencia que excede con creces el ámbito centroamericano y se proyecta a escala continental. 

Su hazaña fue el premio a doce duros años de militancia en los cuales ella y su marido, el derrocado ex presidente Manuel “Mel” Zelaya, militaron incansablemente para construir una alternativa a las marionetas que Washington se las ingenió para imponer en Honduras luego de la destitución de Zelaya, el 28 de Junio de 2009. 

Este fue el primer “golpe blando o institucional” que el gobierno de Estados Unidos puso en práctica en la región y, tal vez, la partida de nacimiento del Lawfare como práctica destituyente y de persecución política. 

Desde entonces se utiliza para proscribir -o por lo menos obstaculizar- la presencia de líderes populares en Latinoamérica. 

En 2012 la víctima fue Fernando Lugo en Paraguay y en 2016 Dilma Rousseff. Muchos otros y otras son víctimas de esa nefasta invención norteamericana: Lula, Evo, Correa, Cristina, Glas, Rivadeneira, Patiño, etc, y la lista no es exhaustiva. 

No fue casual que en ambos países –Paraguay y Brasil- y en esos precisos momentos la embajadora de Estados Unidos fuese la misma: Liliana Ayalde.

¿El pecado de Zelaya? 

Haber incorporado su país al ALBA, fortalecido los vínculos con la Venezuela bolivariana y pretender consultar a la ciudadanía si quería o no que se convocara a una asamblea constitucional. 

Lo que siguió fue una tenaz resistencia de Zelaya y Xiomara, luego el exilio y después una implacable persecución, mientras el país se convertía en un páramo sumido en la pobreza y la violencia. Washington impuso, mediante elecciones fraudulentas a dos peones: Porfirio Lobo Sosa y Juan Orlando Hernández, el hipercorrupto -según la Justicia de Estados Unidos y la opinión de las segundas líneas del Departamento de Estado- pese a lo cual Barack Obama, Donald Trump y Joe Biden siguieron admitiéndolo como uno de los líderes democráticos de la región. 

Más de una treintena de muertos en protestas populares jalonaron la re-elección de Hernández a la presidencia en 2017. Parece que Almagro no se enteró; tampoco lo hicieron sus amos en Washington. Pero Xiomara no aflojó en su lucha. 

Así las cosas hoy adquiere el mérito histórico de haber barrido con un aluvión de votos a la mafia política enquistada en Honduras con la bendición de la Casa Blanca. 

Y lo hizo en las elecciones con la mayor tasa de participación de la historia hondureña (unos tres millones y medio de votantes) que la convirtieron en la presidenta más votada de su país y, además, en la que atrajo a las urnas al desencantado voto juvenil, unos dos millones en total. 

Su arrollador avance liquidó también, ojalá que para siempre, el arcaico bipartidismo liberal-conservador que todavía agobia a Colombia, y puso fin a uno de los narcogobiernos más descarados de Latinoamérica y el Caribe, sostenido contra viento y marea por sucesivos presidentes norteamericanos. 

Amanece en Honduras, lo cual no es poca cosa. 

Mel ha sido reivindicado por su compañera de toda la vida; y ella, Xiomara, demostró poseer un talento y unas agallas –sí, “agallas”, porque sin ellas no se puede hacer política- que la convierten en una referencia insoslayable en los nuevos vientos que están barriendo la región. 

Como latinoamericano sólo puedo hacerle llegar mi más emocionado agradecimiento por su épica batalla.

Fuente: 🗞. Xiomara Castro inaugura una nueva era - fortymodeste@gmail.com - Gmail (google.com)

Atilio A. Boron

 

MANIFIESTO DE EXGUERRILLEROS EN EL 58 ANIVERSARIO DEL ALZAMIENTO DEL 1J4

CON MANOLO SIEMPRE, SEGUIMOS LEALES AL PUEBLO DOMINICANO

Nosotros, participantes del alzamiento guerrillero del Movimiento Revolucionario 14 de Junio, ocurrido el 28 de noviembre de 1963 contra el gobierno golpista del triunvirato, manifestamos hoy, 28 de noviembre de 2021, lo siguiente:

El 14 de junio de 1962, Manolo Tavárez exclamó en la plaza pública: “Óiganlo bien, señores de la Reacción, si imposibilitan la lucha pacífica del pueblo, el “14 de Junio” sabe muy bien dónde están las escarpadas montañas de Quisqueya;  y a ellas.. a ellas iremos, siguiendo el ejemplo y para realizar la obra de los Héroes de junio de 1959, y en ellas mantendremos encendida la antorcha de la libertad, el espíritu de la Revolución….  porque no nos quedará, entonces, otra alternativa, que la de ¡Libertad o Muerte!’’

Era la advertencia de nuestro líder a los enemigos del pueblo, a los enemigos de la democracia y de la autodeterminación de los dominicanos. 

Con la interrupción del orden constitucional democrático del 25 de septiembre de 1963, la insurrección fue nuestro repudio al golpe que anuló el estado de Derecho, fue la respuesta a una criminal persecución contra los ciudadanos progresistas y contra los allegados a Bosch, leales al derrocado partido Revolucionario Dominicano, PRD, y sobre todo a su programa de gobierno. El golpe tramó e impidió con violencia las reformas que ya postulaba Juan Bosch. El cuartelazo dividió el ejército y frenó las actividades emprendidas. Manolo dijo que los golpistas desintegraron las cámaras de senadores y diputados, disolvieron el Gabinete y el cuerpo diplomático y consular del país.

Si el golpe de Estado cerró en 1963 el derecho a la lucha política pacífica, a la educación, a la salud, la cultura y la Justicia, fue por el afán de controlar el país y tener luz verde para el saqueo de las arcas públicas.

Asumirse como los dueños del país era el objetivo de convergencia entre los golpistas. Repartirse la piñata de poder que habían concentrado los Trujillo era su objetivo. Por eso hoy es la fecha en que todavía esos sectores siguen gozando de impunidad y siguen tutelando la política en República Dominicana. Esos mismos sectores que tramaron y aplaudieron el golpe y luego una intervención militar extranjera, continúan el secuestro del interés general, privatizando los recursos naturales, dirigiendo la política fiscal del país, y mantienen en sus manos el sistema de seguridad social de los dominicanos, el sistema educativo nacional. Distrayendo así para beneficio propio las riquezas de todos, el patrimonio de todos, el futuro de todos.

Para garantizarse la vigencia de esos parámetros, la clase empresarial y política gobernante ha afianzado su predominio, en base a organismos de seguridad del Estado que ejercen sus funciones represivas de nuestros barrios y poblaciones más humildes, siguiendo las doctrinas que le impusieron desde 1965 las fuerzas de ocupación. Al igual que lo hicieron el 16, cuando nos dejaron a Trujillo. Denunciamos que los actuales esfuerzos de sectores conservadores de crear una jurisdicción de tribunales exclusivos para militares, busca perpetuar ese régimen histórico de impunidad de prácticas que manchan un uniforme que es digno de mejores suertes.

El 14 de junio tuvo razón al alzarse en noviembre de 1963.  Y abril nos dio razón. A 58 años de aquel levantamiento, nosotros, sobrevivientes de los seis frentes guerrilleros, expresamos nuestro reclamo de justicia por los crímenes de Estado cometidos contra Manolo Tavárez y 28 compañeros, todos jóvenes, hoy mártires de la patria, asesinados por tropas del ejercito dominicano al servicio de una potencia extranjera. Las muertes siguen sin ser investigada y sin sanción alguna. 

Reiteramos nuestra lealtad incondicional con la gente de este país, en su combate cotidiano por las causas de justicia social de hoy, y que aún se encuentran pendientes de concretar. Y nosotros estaremos ahí siempre, hasta el último minuto de vida, al lado del pueblo dominicano. Más temprano que tarde, el pueblo dominicano será verdaderamente libre de tutelas antidemocráticas, de miserias y autoritarismos. 

Hoy más que nunca, y con Manolo y Minerva en el recuerdo, decimos con profunda esperanza: 

¡Tierra para los campesinos, trabajo digno para los obreros, pan y libertad para todos. Por eso lucha 14 de junio! 

Santo Domingo, 28 de noviembre de 2021.