sábado, 18 de junio de 2022

En la UASD el gobierno aprovechó los valores dominantes. Se la jugó y ganó

Por: Manuel Salazar

El candidato del gobierno a la Rectoría de la UASD ha ganado las elecciones de manera holgada, tras una ofensiva de ministros, gobernadores, otros funcionarios del poder ejecutivo y de congresistas del partido oficial que constataron que su propuesta tenía perdida la partida siete días antes de las elecciones y por decisión del gobierno se lanzaron con todo a revertir la tendencia.

Aunque en los resultados hay contrastes como los de que el Dr. Asjana ganó seis de nueve decanatos  y los restantes tres van a segunda vuelta. Es decir, el candidato del gobierno ganó la Rectoría, pero no ganó hasta ahora ningún decanato, siendo los mismos votantes para uno y otro nivel.

Contraste también hay en los resultados de los centros regionales de la región sur. Aquí los candidatos del Dr. Asjana ganaron en Barahona, San Juan de la Maguana y Baní. Tres de cuatro centros.

Son casos a reflexionar porque el Dr. Asjana pierde para rector, pero gana la mayoría de los decanatos, y lo propio sucede en los  centros de la región sur.

En unos cortes del 15 de febrero y el 9 de marzo se tenía datos de la caída del candidato del gobierno y la perspectiva al ascenso del Dr. Jorge Asjana. El 5 de junio este mostraba una significativa posibilidad de victoria, según los datos de un estudio del  mismo oficialismo.

Y aquí se encendió la preocupación del gobierno.

Un gobierno a la baja en la percepción general de la sociedad, que por demás busca la reelección, tenía que evitar una derrota que podía ser tipo "jaque", dado el simbolismo de la UASD,  el más concurrido y emblemático centro cultural y académico, al que concurren personas de todo el país. Lo que sucede en la UASD expresa en mucho el sentir del país.

El gobierno a la baja en la conciencia colectiva, que por demás sufrió una derrota emblemática hace meses en la Asociación Dominicana de Profesores (ADP), tenía que evitar una derrota y para eso no hizo cálculos de métodos a emplear, ni qué ni cuánto invertir. Recursos del poder, objetivos-materiales, y subjetivos como el chantaje  y la amenaza, fueron puestos en movimiento.

Como hicieron los gobiernos del PLD en situaciones parecidas hasta hartar a la sociedad y provocar un levantantamiento cívico que se expresó en su derrota en  las elecciones del 5 de julio del 2020.

En estas elecciones en la UASD el gobierno observó la posibilidad de la derrota, valoró escenarios, se la jugó  y ganó. Ahora queda valorar, más que los datos electorales, lo que hay de fondo en la experiencia.

Las energías deben ser dedicadas a evaluar el estado de los valores que hacen posible la inmersión exitosa del poder del gobierno en la conciencia de académicos para llevar a estos a que elijan como su principal autoridad a una persona que, si bien pudo haber sido buen vicerrector administrativo, parece que sí lo fue; pero que comenzó a reducir de manera estrepitosa en las preferencias de los votantes desde que dio muestras sobradas de no poder formular siquiera propuestas académicas.

Entonces el gobierno se inmiscuye con su poder material. Insólito. Casi macondiano.

Lo dijeron Carlos Marx y Federico Engels: "los valores dominantes en la sociedad son los de las clases dominantes". Y demás en más, estas clases han impuesto los valores del mercado a tal punto que ya está consolidada la compra y venta de conciencias.

Uno de los singulares aportes de Antonio Gramsci a la lucha revolucionaria es, precisamente, haber establecido como condición para que esta tenga éxito la necesidad de desmontar de la conciencia colectiva los valores hegemónicos de las clases dominantes.

La UASD es parte de la sociedad y está bajo la influencia de los valores que la dominan. Solo así se puede entender el resultado  de las elecciones para rector.

Apelar al abuso del poder deja mal señalado al gobierno que lo afirma como recurrente a los mismos métodos que usaron sus antecesores, a los que se supone negaría. Y aunque logra su objetivo de ganar en la UASD, se cualquieriza cayendo en lo mismo que prometió superar cuando sus incumbentes eran oposición al PLD.

Al país político le queda una lección. ¿Cuál es? comprender de una vez y por todas que en la cuestión de la búsqueda del poder hay que derrotar al poder material; pero esto solo es posible si se derrota el poder de los valores que surgen del poder material que se busca derrotar.

Si el sistema clientelar se expresa con connotaciones macondianas en un centro de la cultura, las ideas y la ciencia en general como es la UASD, hay que estimar la envergadura de la tarea que significa derrotar ese flagelo en la sociedad política.

El equipo de trabajo del Dr. Asjana, que con éxito  desarrolló una labor de resistencia a los valores dominantes, llegando a derrotarlos hasta que el poder del gobierno intervino, tiene mucho que aportar en lo adelante desde la misma plataforma de la UASD.

Manuel Salazar

La derecha no tiene nada que ofrecer

Por José M Félix

La derecha dominicana y sus partidos parecen haber llegado a un callejón sin salida, 

Estaríamos, en lenguaje sociológico. al final del laaargo ciclo conservador que se inicia luego de la invasión norteamericana de 1965, hasta hoy.

Los poderes fácticos, con la oligarquía familiar a la cabeza, se bastan  a sí mismos. Ya no dependen de las tradicionales franquicias políticas. Han probado el poder de manera directa y desde ahora en adelante. mientras les sea posible y factible. actuarán en política solo con miembros muy bien escogidos de su propia casta.

Pero su base económica e ideológica, el  neoliberalismo, en palabras de Álvaro García Linera, ex Vicepresidente de Bolivia, ´se presenta como un defensor de un mundo en retroceso, no como constructor de futuro, como en los 90.  Ese discurso se desvaneció (...) porque el neoliberalismo actual es un neoliberalismo cansado, con signos de decrepitud´.

¿Cómo empezó y cómo se encuentra hoy el neoliberalismo criollo?

La economía neoliberal, predominante durante las últimas cuatro décadas, se construyó desde el Estado en la medida en que este  iba siendo cooptado por los poderes fácticos.

En el caso dominicano fueron determinantes los manejos y el tutelaje ejercidos por los norteamericanos mediante sus brazos ejecutores del FMI, del Banco Mundial y de otros organismos internacionales además de la complicidad patrocinada de ciertos economistas y ONGs locales, desde muy tempranito en los 80.

Fue durante el gobierno perredeista del Dr. Salvador Jorge Blanco cuando se implementó, acorde con la doctrina del shock, un ajuste macroeconómico sujeto a las recetas Fondomonetaristas del llamado ́ Consenso de Washington ́, la incubadora de lo que posteriormente llevaría el nombre de Neoliberalismo.

Nos convertimos en uno de los primeros países del Caribe y gran parte de la región Latinoamericana en recibir la inoculación neoliberal, siendo también los primeros en articular una repulsa popular en contra del Neoliberalismo allá por abril de 1984 con la población.

Como resultado de esta contundente respuesta popular, la Nueva Política Económica (NPE) se seguiría imponiendo aunque de manera gradual a partir de ahora. Abandonando la vía del shock con la que se había iniciado.

La economía Neoliberal se fue levantando ´Piedra sobre Piedra´ en el transcurso de los diferentes gobiernos que se han sucedido desde la década de los 80 hasta el día de hoy.

En este montaje participaron todas las siglas partidarias que han sido gobierno: PRD, PRSC. PLD, y de manera especial el actual PRM.

Si de hecho existía un común denominador entre todas estas siglas partidarias fue precisamente su adhesión al Neoliberalismo, tanto en la economía como en su ideología.

De esta forma en los siguientes  diez años de gobierno del Dr Balaguer (1986-1996), posteriores al ajuste económico de 1984, se retomó la agenda de Washington comenzando con la apertura comercial y la desregulación de los mercados. La Reforma Tributaria y Laboral junto a la flexibilización de la ley de Inversión Extranjera, entre otras.

Otra de las piezas clave de la NPE consiste en hacer que la subcontratación Estatal se consagrara como el principal ´Modus Operandi´ en la construcción de obras de infraestructura y en la prestación de ciertos servicios públicos,  Este último componente abrió las puertas a la compañera inseparable del Neoliberalismo: la corrupción administrativa a gran escala, en perfecta combinación con una parte del empresariado nacional e internacional.

Por otra parte, las leyes de incentivo al sector turismo y de Zonas Francas se les dio un gran impulso. Ambos sectores se convertirían en las puntas de lanza de la NPE.

Con el primer gobierno del PLD Leonel Fernández da inicio a la primera ola privatizadora (llamada Capitalización de las empresas del Estado) que incluía los principales activos públicos: CORDE, ingenios y propiedades del CEA, la CDE, CORPHOTEL 

Estas medidas sirvieron para profundizar e impulsar aún más la reconversión Neoliberal de la Economía.

Más tarde, con la llegada nuevamente del PRD al poder con Hipólito Mejía en el año 2000, se continuó con la adecuación de la economía dominicana al llamado ´Nuevo Orden Internacional. Destacando este periodo por las privatizaciones de puertos, aeropuertos, la adhesión a DRCAFTA, un TLC promovido por EEUU.

Como si esto resultara poco, Hipólito promulga la ley 87-01 que convierte en negocio el derecho constitucional de todo dominicanos a disfrutar de una seguridad social digna, y entregando  en ¨bandeja de plata" a la oligarquía financiera (las famosas AFP, ARS) entre otras bellezas.

Posteriormente en el periodo del peledeato que duró 16 años y que abarcó cuatro periodos de gobierno desde 2004 al 2020, con alternancia de dos periodos por cabeza entre Leonel Fernández y Danilo Medina, el Modelo Neoliberal sufrió cambios significativos que incluyeron una primera fase de auge, de posterior estancamiento y más adelante un intento de recomposición,

A finales del primer periodo del Dr. Fernández el modelo entra en un proceso de estancamiento y crisis caracterizadas por un importante desbalance de la relación Capital/Trabajo, de la mano con  un ensanchamiento de la desigualdad social y de  la inequidad del ingreso con incremento de la pobreza, elementos que estaban detrás del malestar y el desencanto que se había incubado al interior de amplios sectores de la población dominicana.

A su arribo al gobierno en el año 2012, Danilo Medina recibe  la economía Neoliberal sumida en grave crisis,

E los medios de comunicación se debatía sobre la alternabilidad del modelo económico, por lo que se pensó que el nuevo gobierno pudiese darle un nuevo giro a la política económica vigente pero Medina  ni siquiera hizo el intento por sustituir, todo lo contrario, se montó sobre la ola en declive del modelo Neoliberal e intentó retrasar su evidente agotamiento introduciendo nuevos elementos que le ´lavaron la cara´  y que le brindaron un cierto margen de maniobra para continuar.

Aquí entran a escena medidas como la aplicación del 4% del PBI para Educación, la ´democratización´ en el otorgamiento de obras de infraestructura y el invento denominado ´visitas sorpresa´, diseñado para el sector agropecuario, entre otras.

Con este ´maquillaje´ a la economía Neoliberal, el PLD logra prolongar la vida al ´Status Quo´ caracterizado por un capitalismo Neoliberal rentista y dependiente, sustentado sobre la base de grandes concesiones y privilegios a la acumulación capitalista nacional e internacional.

En las postrimerías de este último periodo peledeísta, la economía neoliberal estaba dando señales de profundo deterioro pues los efectos de las  mejoras  introducidas por Danilo Medina en el plano social, fueron de corta duración y terminaron convirtiéndose en un nuevo botín para la corrupción. Muy típico de los gobiernos neoliberales.

La pandemia del Covid 19 saca a flote todos los males que la economía Neoliberal había creado y que arrastraba como una pesada carga: disminución del nivel de vida de los trabajadores y del pueblo en general, incapacidad del sistema sanitario, con alto grado de privatización, de hacer frente al Covid, incremento de la marginalidad y sus secuelas sociales. subida de la informalidad laboral etc. sorprendiendo al gobierno que responde débilmente con un paquete de medidas insuficientes e ineficaces sin atreverse a tocar ́ ni con el pétalo de una rosa ́ a la a la vieja economía Neoliberal. dejando recaer todo el peso de la crisis sobre los hombros del pueblo trabajador.

En el plano político la derecha y los poderes fácticos, incluyendo los norteamericanos, tenían planeado desplazar al PLD tras 16 años consecutivos en el poder, por diferentes razones que no expondremos en esta ocasión, Esto se materializa en las elecciones de Julio del 2020 con el arribo de Luis Abinader junto a la derecha dura encabezada por la oligarquía familiar tradicional que inmediatamente impone su presencia activa en el nuevo gobierno,

Pero cuando la gran mayoría del pueblo que votó por el PRM y que había sufrido en carne viva los estragos causados por la ´larga noche Neoliberal´ impuesta durante los veinte años de gobierno peledeísta y los cuatro años del PRD, por fin pensó que el gobierno del cambio sería diferente, algo así como lo prometido en su programa de gobierno (un libraco de propuestas muchas de ellas de corte progresista escrito y pensado fundamentalmente por el hoy Ministro de Economía Miguel Ceara Hatton y sus colaboradores).  Pero no, ese programa de gobierno tuvo como destino el pronto olvido y fue sustituido por una ¿nueva? agenda de gobierno cuyo contenido era…OH sorpresa! más Neoliberalismo, esta vez disfrazado de APP, Fideicomisos y ventas solapadas de activos públicos

Por si acaso sirve de algún consuelo diré que esto no es un fenómeno exclusivo de este gobierno ya había sucedido antes en la ola conservadora ocurrida en la región a partir del triunfo de Mauricio Macri en la Argentina en 2015 que intentó revertir el avance obtenido en los gobiernos progresistas de los Kichner, sustituyéndolo por políticas neoliberales que lo único que lograron fue sumir a ese país en la más grave crisis económica 

Lo mismo aplica para los demás gobiernos de derecha que sustituyeron al progresismo de la primera ola: Bolsonaro en Brasil, Iván Duque en Colombia, PPK en el Perú, JOH en Honduras, La Calle Pou en Uruguay y paro de contar.

A pesar de que la ola conservadora en nuestro país ha sido la más larga del continente y el hecho de que en la región ya vamos por la segunda ola de gobiernos progresistas y que por aquí no ha pasado ni la primera, la derecha ha demostrado a lo largo de todos esos gobiernos que ya no tiene nada que ofrecer a los pueblos de América, otra que Neoliberalismo y más Neoliberalismo, que la sustenta y que muy a pesar de estar siendo rechazado y combatido por la mayoría de los pueblos de la región latinoamericana, tanto la derecha dominicana como la continental, se encuentra incapacitada de ofrecer un cambio de las  estructuras que los ha hecho ricos y poderosos.

Este solamente  podría llevarlo a cabo el propio pueblo organizado en los movimientos sociales y populares junto a una vanguardia política progresista e independiente.  En nuestro próximo artículo trataremos el tema de los elementos que conforman  la pauta para la conformación de un frente antineoliberal. 

José M Félix