sábado, 7 de agosto de 2021

VELEIDADES DE LA PEQUEÑA BURGUESÍA

 Por Fortune Modeste Valerio

Breve introducción 

No hay dudas en el papel estelar de la pequeña burguesía en la región de América Latina, en especial en países como el nuestro. Su accionar ha sido clave para producir estallidos revolucionarios y democráticos. Desconocer su rol, es vivir de espalda a la realidad. 

Como clase social, explosiva, intermedia tiene al mismo tiempo muchas deficiencias y debilidades que de no prevenirlas y combatirlas, puede irse a pique los proyectos que ella dirige y organiza. De la única forma de controlarla es mantenerla apegada a la teoría revolucionaria; con un método de trabajo, mística y disciplina. No hay de otra. 

Su volubilidad no la hace una clase confiable. Su misma condición de tránsito entre burguesía y el proletariado le permite no estar estable, por sus oscilaciones. En ella se conjugan el peligro y la heroicidad.

Muchos son los ideólogos de la teoría revolucionaria que han hablado y explicado su pensamiento; su forma de pensar y su práctica social. Desde Carlos Marx, Federico Engels, Vladimir I Lenin, José Carlos Mariátegui, Marta Harnecker, Juan Bosch, y otros, han escrito sobre las veleidades que le adorna. 

De todos, el profesor Juan Bosch nos ha dejado un material novedoso y en abundancia para conocer a una pequeña burguesía que oculta sus verdaderas intenciones de clase para alcanzar su objetivo. 

Reitero, el material del profesor Juan Bosch es excelente instrumento de consulta para los países, con las características, de la región y otras partes del mundo. 

Veamos a Don Juan Bosch: 

"Una parte de la alta pequeña burguesía latinoamericana desdeña a la mediana y desprecia a la baja; se siente dueña de derechos y privilegios especiales; es ostentosa, vive con más lujo del que pueda mantener y no somete su conducta a los principios conocidos. 

Tanto en la baja como en la mediana como en la alta pequeña burguesía hay sectores revolucionarios, pero son revolucionarios dentro de sus inclinaciones--adquiridas desde luego-- de clase, y aspiran, casi sin darse cuenta, a usar la revolución para ganar prestigio y posiciones de mando, lo que en cierto sentido es un desplazamiento hacia el terreno político de las aspiraciones de ascender en el campo económico y social. 

Debido a que le es muy difícil cambiar sus hábitos de pensar y actuar, la pequeña burguesía de inclinaciones revolucionarias lleva a la lucha política esos hábitos, sus tendencias a competir con los demás por una posición, a usar el chisme y la calumnia para desplazar a sus competidores y a dividir a las organizaciones en grupos para pasar a dirigir esos grupos." (*) 

(*)  Dictadura con respaldo popular.

Juan Bosch. Pagina 50.Coleccion Bosch para todos. Ediciones Fundación Juan Bosch, Impresora Soto Castillo S.A.2012.

Profesor Juan Bosch


MARILEIDY PAULINO: LA NACIÓN EN UNAS VELOCES PIERNAS

Por Manuel Salazar 

El pueblo dominicano ha celebrado con entusiasmo, y justa razón,  la conquista de la medalla de plata de Marileidy Paulino en la competencia de los 400 metros planos de los juegos olímpicos Tokyo 2020. 

La dignidad y orgullo de la dominicanidad se han levantado alto con este triunfo. 

Porque, es que, desde antes que nos constituyéramos en nación, desde los tiempos de la conquista en 1492,  los que  hoy somos dominican@s comenzamos  a sufrir vicisitudes que perviven hasta hoy.  Por aquellos días,  nuestra raza aborigen fue exterminada sin piedad por los conquistadores españoles, con tanta atrocidad  que nada quedó  ni en la genética de las generaciones siguientes. 

El robo de las riquezas de la isla, sustentada en la violencia contra los habitantes de cada entonces,  sucedió desde el 12 de octubre de 1492 y tiempos siguientes durante cientos de años seguidos.

Dictaduras se impusieron a muerte  varias veces,  contra los deseos de libertad y progreso del pueblo dominicano. 

Intervenciones militares yanquis  ahogaron en dos ocasiones los propósitos democráticos e independentistas de este pueblo,  que siempre ha luchado por ser libre y próspero. 

Golpes de Estado torcieron más de una vez el rumbo político y social que quisimos 

Traiciones de partidos,  que prometieron una  cosa para ganar el voto popular, y una vez llegaron al poder, hicieron lo contrario a las expectativas populares que crearon;  han contribuido a la desazón histórica de nuestro pueblo.

Huracanes y terremotos se han sucedido cada cierto tiempo,  para derrumbar esperanzas. 

Es que, desde 1492, sin parar,  los de la isla de Santo Domingo, hemos sufrido vicisitudes que han marcado nuestro Ser nacional. Y sintetizan cierto grado de derrota histórica,  que a veces  desaparece con el logro de algún  triunfo efímero.

Es por eso, que el pueblo dominicano disfrutaba cada ponche propinado por Pedro Martínez a los bateadores de los yanquis de Nueva York; se gozaba  los jonrones de Samuel Sosa en  la competencia jonronera con el gringo  Mark MacGwire, en la pelota de las grandes ligas.

Esos ponches de Pedro Martínez y jonrones de Samuel Sosa, eran la nación dominicana, en su lucha de cientos de años, por ser lo que ha querido ser y se le ha impedido.

Hoy,  el coraje y las veloces piernas de una mulata de piel oscura, por demás nacida y criada en la pobreza material,  ponen a correr la nación dominicana hacia su dignidad.

Este triunfo de Marileidy Paulino ocurre, por demás, cuando gran parte del pueblo dominicano lamenta la muerte de Johnny Ventura, símbolo señero de la dominicanidad, y en ese sentido, su medalla de plata en buena lid conquistada, es un paño para secar lágrimas de un pueblo. 

Marileidy Paulino es, en este momento, la nación dominicana  en movimiento.

Manuel Salazar