jueves, 24 de octubre de 2024

Unidad y lucha: Victoria contra el paquetazo fiscal neoliberal

SANTO DOMINGO, REPÚBLICA DOMINICANA. Varias organizaciones, partidos y militantes de las posiciones políticas de la izquierda revolucionaria dominicana, afirmaron que la perseverancia de la unidad y lucha por los intereses de las grandes mayorías, la soberanía nacional y un mundo mejor, es el camino para alcanzar la victoria, como lo demostró el triunfo contra el paquetazo fiscal neoliberal, que pretendía imponer el presidente Luis Abinader y el gobierno del Partido Revolucionario Moderno (PRM).

Así lo expresaron en rueda de prensa realizada en el Colegio Dominicano de Periodistas, dirigentes del Partido Comunista del Trabajo (PCT), el Movimiento Caamañista (MC), Fuerza de la Revolución (FR) y el Referente de la Izquierda Dominicana (RID) integrado por el Movimientos Popular Dominicano (MPD), Partido Socialista Dominicano (PSD), Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR), Partido Patria para Todos y Todas (PPT), el Movimiento Revolucionario de Izquierda (MRI), y varios militantes revolucionarios.

Al hablar en representación del referido espacio unitario, el economista Manuel Colón expresó que a raíz del fallido intento del paquetazo tributario, los firmantes, de la declaración han comprendido la necesidad de la unidad y lucha, con la finalidadde convertirse en una alternativa política para defender los intereses de los trabajadores, campesinos, pequeña burguesía, empobrecidos y demás sectores explotados.

Destacó el triunfo contra las pretensiones del presidente perremeísta Luis Abinader, de imponerle al pueblo la contrarreforma del Paquetazo fiscal y tributario, el cual iba a empobrecer aún más al pueblo y deprimir más a la clase media, favoreciendo al gran empresariado

“La valiosa experiencia en esta lucha popular tiene sentido, pues con ella este  conglomerado de las ideas revolucionarias de izquierda y antimperialista,   pudo comprobar y valorar esta experiencia inicial de unidad de acción popular,  en el entendido que  solamente  con  la  lucha  y  la  unidad podemos  convertirnos en un polo político alternativo a la burguesía y su modelo neoliberal expresado en el  PRM, PLD, FP y demás alicate  político del  gran  capital nacional  e  internacional”, precisó Colón.

Agregó el vocero de los grupos de izquierda, que siempre que luchemos con razón y ventaja, seguiremos obteniendo triunfos, de lo pequeño a lo grande y de lo simple a lo complejo, hasta ir creando poder social y político, hasta la toma del poder participativo.

La izquierda revolucionaria alertó, porque fracasada la propuesta de “Modernización fiscal” en el Congreso Nacional, el presidente Abinader y su política neoliberal buscarán recursos vía reajustes y préstamos, que también perjudicarán al país, y principalmente a los bolsillos del pueblo y de la clase media.

Además, consideran que sin medidas que perjudiquen al pueblo, el gobierno puede recaudar todo el dinero que necesita para resolver los problemas nacionales.

Propuestas

Colón informó que, ante la derrota, el presidente Luis Abinader anunció que hará reajustes en el gasto público, con la finalidad de garantizar los objetivos económicos   y   sociales   que   se   ha propuesto, y proteger los privilegios de los ricos y los grandes evasores de los tributos en nuestro país.

Ante esta situación, los grupos de izquierda y militantes revolucionarios proponen:

1.- Continuar la lucha popular y de masas para derrotar en las calles las medidas económicas del gobierno y el FMI que perjudican los bolsillos de las masas populares y la clase media.

2.-Por una declaratoria de moratoria al pago de los intereses de la deuda pública.

3- Por la reducción en un 75% de los gastos de publicidad y otros gastos que pudieran ser suntuosos.

4- Reducción de los gastos en viáticos y en primera clase a todos los funcionarios públicos, incluyendo de alto nivel. Eliminación inmediata de las tarjetas de crédito para gastos de representación.

5.- Por la reducción del presupuesto al Congreso, mediante rebaja de sueldos y viáticos, de las  compensaciones a los congresistas,   y eliminación total del   barrilito y el cofrecito de Senadores y Diputados.

6.- Revisión rigurosa mediante auditoría externa, con fines de reducir los presupuestos de obras públicas, sospechosas  de sobrevaluación.

7.- Eliminación inmediata del subsidio que, a través de la Junta Central Electoral, se otorga a los partidos políticos.

8.- Eliminación de la evasión fiscal mediante una sustancial mejoría de la administración tributaria.

9- Reducir el  Gasto Tributario, lo que consiste en que el Estado deja de percibir por exenciones y exoneraciones al empresariado y empresas. En tal sentido, proponemos eliminar las exenciones fiscales, dejando solamente las estrictamente necesarias para el fomento y desarrollo de los sectores que las reciban. O sea, unos RD$231,000 millones para exenciones fiscales (transferencias corrientes a empresas privadas) que se propone para el Presupuesto Nacional del 2025.

10.- Por la asignación, transparencia y eficiencia  de más recursos a los servicios públicos como salud, educación,  seguridad social, viviendas populares, carreteras, presas, y a todo lo que implique desarrollo social y económico;  que mejore las condiciones de vida de las mayorías populares, preserve los recursos naturales y el medio ambiente, al tiempo que potencie las fuerzas productivas y la producción nacionales, contrario a la política de gasto del presidente Luis Abinader, que es muy pobre en relación con la enorme deuda social y las necesidades más urgentes, entre ellas la grave crisis ambiental y su déficit de agua.

11.-  Disminuir la evasión del ITBIS de 40% a un 10% para producir nuevos ingresos fiscales.

12.-Eliminacion de la evasión del Impuesto sobre la renta (ISR), para cobrar miles de millones más.  

13.-  Reducir el gasto público en por lo menos un 10% del total de los gastos anuales innecesarios.                                                               

14.-Reducción de subsidio y transferencia a empresas e instituciones públicas y a sectores privados, desde el gobierno central en no menos de un 40 %.

15.- Disminuir la corrupción pública, que representa al menos el 30 % del Presupuesto Nacional. En la medida que esto se logre bajo la presión popular, la lucha contra la corrupción irá perdiendo el carácter de arma y estrategia política aplicable a otros, pero no a si mismo que tiene actualmente, por lo que la población percibe tal lucha como un oportunismo y una burla a su aspiración histórica de erradicación de este mal endémico a la administración burguesa de la cosa pública.

16.- Recuperar con celeridad lo usurpado y/o robado al Estado y cobrar los pasivos ambientales provocados y adeudados por las empresas mineras, de agregados, turísticas y forestales.

17.-Regular el mercado interno y las importaciones, procurando eliminar monopolios y oligopolios que lo manipulan a su favor.

18.- Afectar las grandes ganancias de empresas y empresarios individuales. Su aporte al fisco, siendo uno de los sectores que más pueden, es uno de los más bajos de la región latinoamericana y caribeña.

20.- Revisar y revaluar el diseño de pensiones, eliminando aquellas otorgadas por favoritismo político a personas que no la necesitan ni se la han ganado y mejorar en cambio las pensiones miserables que reciben decenas de miles de trabajadores/as y servidores que dedicaron sus vidas a la generación de riquezas.

21.- Regular el mercado interno y las importaciones, procurando eliminar monopolios y oligopolios que lo manipulan a su favor.

Finalmente, llamamos al pueblo dominicano a estar alerta y preparado para la lucha ante la decisión ya anunciada por el presidente Luis Abinader y su gobierno, que procederá a hacer reajustes en el gasto público para garantizar los objetivos económicos y sociales que se ha propuesto.

Por el espacio unitario de  la izquierda revolucionaria firman:

Partido Comunista del Trabajo (PCT).

Movimiento Caamañista (MC)

Fuerza de la Revolución (FR).

Partido Patria para Todos y Todas (PPT)

Referente de Izquierda Dominicana -RID- (MPD, MIR, MRI, PSD, Carlos Reyes, Luis Villar, Julián Guzmán, Tomás Díaz).

IndependientesRamón Fondeur, Carlos Domínguez, Bienvenido Scharboy, Héctor Hernández, Fortune Modeste.

Santo Domingo, D. N.,

24 de octubre de 2024.




Nuestra izquierda y las causas de su crisis ( 2 )

Por: Francis Santana

Hoy escribiré sobre cómo se manifiesta la crisis de la izquierda dominicana de manera concreta.

Desde el inicio de la década de los años 70 del pasado siglo vengo escuchando y leyendo que nuestra  izquierda está en crisis.

Crisis que evidentemente se  ha estado profundizando a tal grado que  hoy, ya  las organizaciones de la izquierda dominicana no  son ni una sombra de lo que fuera por ejemplo, el Movimiento Revolucionario 14 de Junio, liderado por Manolo Tavárez Justo y Minerva Mirabal al inicio de los años 60 del siglo XX.

Se trata de una crisis integral que ha impedido convertirnos en una fuerza capaz de disputarle el poder a las clases dominantes con reales posibilidades de éxito.

Veamos:

1- La izquierda dominicana no existe en la mayor parte del territorio nacional y donde opera lo hace con enormes precariedades. 

2- Una izquierda que no crece, que al contrario, involuciona y cuya presencia política  en el país es prácticamente testimonial, incapaz de producir importantes acontecimientos políticos y sociales como tal.

3- Desvinculada políticamente de las masas obreras, campesinas,  de los intelectuales, con exigua participación de mujeres y de jóvenes en sus estructuras y sin atractivos para estos. Una izquierda dirigida e integrada mayoritariamente por envejecientes y sin contar con relevo generacional en su seno. 

4- Incapaz de atraer a amplios sectores de la sociedad hacia sus políticas y  a sus esporádicas acciones como izquierda. Invisibilizadas sus posiciones y hasta el nombre de sus organizaciones  y dirigentes.

5- Con un muy  bajo nivel teórico y cultural de sus integrantes a todos los niveles en cada organización, salvo escasas excepciones.

6- Una izquierda atrapada en las luchas meramente reivindicativas y sin vocación de poder alguno y con una parte considerable de su membresía que no acompaña al pueblo en sus luchas y que justifica su pobre militancia  revolucionaria, con la irregular asistencia a reuniones y eventos, muchos de los cuales nada tienen que ver con un proyecto político que lucha por el poder. 

7- Somos una izquierda que al perder en lo fundamental sus perspectivas de poder, desestimuló a una parte considerable de sus militantes (gente valiosa y honesta la mayoría) que fue abandonando constantemente sus filas y que luego ha sido tratada de manera inadecuada, por la propia izquierda, empujándola  a distanciarse de la causa revolucionaria.

8- Una  izquierda que a ha perdido la voluntad ideológica (salvo escasísimas excepciones) de hacer grandes esfuerzos y sacrificios a favor de la revolución.  Una izquierda en la que cada día se hacen  más predominantes los intereses y aspiraciones individualistas, muy por encima de los intereses colectivos del pueblo y de la nación.

9- Tenemos una izquierda fragmentada en extremo, que se desgarra entre sí, que no se actualiza y que no termina de adecuar sus políticas y acciones a los extraordinarios cambios que ha experimentado nuestra sociedad y el mundo de hoy.

 Una izquierda desfasada.

10- Que ha sido incapaz de dotarse de los recursos económicos, materiales y técnicos necesarios que requiere todo proceso revolucionario verdadero.

Una izquierda que subsiste en medio de mil precariedades de toda índole, cuestión que imposibilita aplicar sus políticas y planes, aún mínimamente.

11- Somos una izquierda aislada en lo fundamental de los movimientos y gobiernos revolucionarios de América Latina (salvo muy escasas organizaciones) en una época en la que es absolutamente imposible coronar victoriosa la revolución sin contar con sólidos y multilaterales vínculos en el plano internacional.

12- La nuestra es una izquierda que carece de un Partido, de un frente político, de un líder o de un liderazgo colectivo que reúnan la suficiente capacidad para motivar, atraer, convencer y movilizar a lo mejor del pueblo y de nuestra sociedad para que simpatice o milite en el proyecto de liberación nacional y de construcción de la nueva y superior sociedad que postulamos. 

13- No hacemos balances regulares de nuestra práctica y por lo tanto no aprendemos de las experiencias que esta nos aporta.

14- La crítica interna a nuestros errores y deficiencias ha disminuido  casi a nivel de su desaparición, ya que por lo general  la misma se asume en términos personales, afectando los vínculos políticos y los afectos, resquebrajando torpemente  la unidad interna en cada organización y en cada frente unitario que nos hemos propuesto construir.

15- Y al no hacer balances de nuestra práctica, al no practicar la critica y la autocrítica con sentido político y con alta responsabilidad, no hemos sido suficientemente responsables para introducir las necesarias rectificaciones que requerimos; rectificaciones que nuestro pueblo nos ha estado sugiriendo y reclamando en alta voz durante décadas. 

No hay dudas de que la situación de crisis permanente de nuestra izquierda incluye muchos otros elementos.

Debemos desentrañar a fondo todos los grandes males de nuestra izquierda, porque de no hacerlo nos incapacitaríamos para hacer aportes trascendentes para la superación de estos y poder situarnos en condiciones más favorables.

Entre todos debemos encontrar esos otros aspectos de la crisis.

En la próxima entrega escribiré sobre las causas de la crisis de nuestra izquierda.

Francis Santana