Partido
Comunista del Trabajo (PCT)
Manuel Salazar:
secretario general
24 de octubre, 2021.-
Declaración pública
Ninguna privatización de EGHID y otros bienes
públicos
¡Que paguen más impuestos los que más ingresos
reciben!
Debe ser rechazado con resolución práctica el
propósito planteado en el gobierno de vender los activos públicos de la Empresa
de Generación Hidroeléctrica Dominicana (EGEHID) y otros bienes públicos, con
lo que dice busca aumentar sus ingresos para el presupuesto nacional.
Porque esas venta, sería más privatización, y esta es contraria al interés de las mayorías populares y de la nación, en tanto les enajena bienes que pudieran ser bien gestionados para generar ingresos al Estado; crear empleos y bienestar general; al tiempo que contribuye a una democratización de la propiedad económica.
La privatización llevada a cabo por los gobiernos del PLD contribuyó a concentrar la riqueza nacional en pocas manos; mantuvo, o creció, la pobreza general; potenció el desempleo, al tiempo que implicó más centralización del poder político al servicio de la oligarquía favorecida con los bienes privatizados.
Además, la de la EGHID, sería por vía de consecuencia, la privatización también de recursos hídricos, del agua, principal generador de energía en las presas.
¡Y el agua es parte de la soberanía nacional! Privatizar el agua es afectar de manera sensible así el consumo de ese bien vital en las grandes mayorías; como también la producción agropecuaria, que es también un componente esencial de la soberanía.
Es además
contraproducente
Porque se está planteando una reforma fiscal que el gobierno sugiere sea el resultado de un pacto, y esa propuesta de privatizar bienes públicos como recurso fiscal, es contraproducente a la idea de un pacto. Porque pone la pelota en la cancha de los grupos de poder económico, y bloquea de antemano a los sectores medios y populares, que, debieran ser los principales interlocutores.
El gobierno tiene de donde sacar mucho dinero.
1.- Eliminar, o como menos
reducir, el gasto tributario, es
decir, lo que el gobierno deja de recibir por exoneraciones y exenciones de
pagos de impuestos a empresas. Este
gasto ha sido proyectado para este año 2021, en unos RD$ 209,657.1 millones,
equivalentes al 4.28% del Producto Interno Bruto. 2.- Eliminar, y como menos reducir, la
evasión fiscal. Según datos del Ministerio de Haciendas, solo la evasión en
el pago del TIBIS en el año 2019, que
las empresas lo cobran a los consumidores y no los ingresan al Estado, se situaba en el 43.6%, lo que equivalía a un
2% del PIB corriente que para ese año alcanzaba RD $4,562, 235.10 millones. En
el caso de la evasión del Impuesto Sobre la Renta de empresas,
la evasión alcanzaba el 61.9% es decir un 3% del PIB; y la de persona física
se situaba en un 57.10% de lo recaudado, y 1.7% del PIB.
En total, el nivel de evasión
fiscal de las figuras impositivas señaladas representaba el 6.75% del PIB.
Eliminar la evasión y el gasto tributario representarían para el Estado unos RD$533,503.18 millones.
3.- Aumentar impuestos a la propiedad, que como se sabe no está en manos de los sectores populares. En el año 2020, apenas aportó en impuestos 7 mil 907. 1 millones de pesos, del total de 550 mil 605. 1 millones; es decir apenas 1.4%.
4.- Aumentar impuestos a las utilidades y ganancias del capital. El capital financiero, por ejemplo, declara ganancias supermillonarias cada año.
5.- Declarar ilegítima parte de la deuda contraída por el anterior gobierno; y abrir un proceso de renegociación en busca de rebajar parte de la deuda actual y diferir pagos de intereses, hasta que la economía logre un firme proceso de crecimiento.
El régimen tributario que debe ser superado.
1.- No puede
seguir siendo que el 96 % de los ingresos del gobierno
provenga de impuestos, y el 4 % de
otras fuentes, no tributarias.
2.- No puede seguir siendo que el 80 % de los
ingresos del Estado por impuestos sean indirectos, provengan de impuestos al
consumo; y este consumo, fundamentalmente del pueblo. En estos impuestos
indirectos, destaca el ITBIS, que es sobre el 35% de estos.
3.- No puede seguir siendo que en sentido general, los bienes y servicios que, hay que decirlo mucho, los consumen en lo fundamental las mayorías populares, aporten el 59 % de los impuestos. Es decir, que, de cada 100 millones, las mayorías populares estarían aportando casi 60.
