martes, 28 de noviembre de 2023

El pueblo de Gaza y toda Palestina continúa de pie. PCT, FR y MPD

(Cuarto comunicado)

Los pueblos como Palestina están del lado de la razón y la historia llenos y pletóricos de verdades; por encima de la mentira, la opresión y el salvajismo, como el que exhiben las bestias sedientas de sangre, tal cuales son Benjamín Netanyahu, Yoav Gallant y toda su FDI.

El prepotente Estado israelí sionista está siendo puesto de rodilla por la resistencia palestina, y por todas las manifestaciones morales y políticas recibidas de parte de la gran mayoría de la humanidad.

No es menos cierto, y muy doloroso que el costo humano y económico que ha recibido el pueblo palestino son  altísimos en pérdidas de vidas humanas, no obstante esto no da la victoria al sionismo israelí, al contrario esto lo acerca cada día más al derrumbe total.

Hemos de manifestar que nuestro repudio no es a la cultura y religión judías, sino al Estado sionista, por igual repudiado éste, por los judíos, que han manifestado un cese al fuego, en el mismo centro del poder imperialista norteamericano bajo la consigna: ¡NO EN NUESTRO NOMBRE!

El mundo no había vivido un genocidio y abusos tan crueles desde las experiencias vietnamitas, hasta la actualidad.

Hoy los imperialistas  con Estados Unidos de Norteamérica a la cabeza son los responsables directos de los hechos bochornosos que cometen los sionistas encabezados por Benjamín Netanyahu, Yoav Gallant, FDI, y demás ultraderechistas.

El golpeo moral y político que han recibido por la solidaridad mundial, en particular por la resistencia regional ha sido mortal; le torcieron los brazos y han tenido que negociar con HAMAS para una tregua de varios días durante la cual han habido liberación de presos políticos palestinos,  y retenidos producto de la acción del 7 de octubre.

 Humanismo y conciencia expresas 

Es elogioso ver como se veían los liberados por la resistencia Palestina. Mostraban alegrías y confesaron el buen trato que recibieron durante el cautiverio. 

Explicaron que no fueron torturados, ni vejados, por el contrario fueron tratados con mucho respeto y consideración por parte de la resistencia palestina.

Con el gesto de la resistencia quedaron desarmados los sionistas y agitadores mundiales de la prensa vendida y mentirosa.

Contrario a todo esta actitud respetuosa de la resistencia Palestina, los liberados palestinos fueron insultados y maltratados.

Pero el humanismo de HAMAS y toda la resistencia Palestina se impuso por encima del salvajismo y la venganza ciega del sionismo alegrero y morboso.

 Estaremos siempre manifiestos y  resueltos con la causa palestina 

Queremos resaltar lo siguiente: como organizaciones revolucionarias de República Dominicana estuvimos y estaremos a la altura práctica y moral para la solidaridad con el pueblo palestino.

Queremos reafirmar nuestros compromisos para con Palestina y todo su pueblo en el camino de lograr la liberación total.

Por último creemos que el sionismo se verá obligado a renogociar la tregua con HAMAS, así opinan grandes analistas políticos y militares, entre ellos ex militares estadounidenses como Scott  Ritter.

Propugnamos una vez más y nos unimos a quienes piden llevar y condenar a por crímenes de guerra a Benjamín Netanyahu ante la Corte Penal Internacional (CPI).

Junto a esto se le deben hacer pagar los daños físicos y estructurales a la economía gazatí; por igual a sus socios y protectores internacionales, como el imperialismo norteamericano y los europeos como Francia e Inglaterra y compartes.

¡Gaza vencerá!

¡Frentes palestinas en alto, jamás de rodillas!

¡ Tregua permanente en toda Palestina!

Partido Comunista del trabajo (P.C.T.)

Fuerza de la Revolución (F.R)

Movimiento Popular Dominicano (M.P.D.) Marxista-leninista

Santo Domingo,R.D., 27 de noviembre del 2023.



Otra vez, lo viejo se niega a desaparecer y sus alternativas están superadas

 Por Julio Disla

La sorprendente victoria del ultraderechista Javier Milei en las reciente elecciones de Argentina, exponente de las posiciones mas atrasadas en la política, representa un retroceso y un duro golpe que nos encendió las alarmas en el universo progresista. Lo que sobrevendrá en este hermano país merece una reflexión profunda, pero estos resultados constituyen un claro mensaje que nos obliga a entender este ascenso de un conservadurismo recargado, Ultra neoliberalismo, que reciclaja el rostro de la derecha, en este caso con un indisimulado sesgo fascista. 

Este proceso sirve como referente regional a las controversiales figuras de Donald Trump y Jair Bolsonaro. En cuestión, ninguna de los dos son casos aislado, ni fruto del error de multitudes confundidas. El problema es sobre todo estructural, y se corresponde con el momento político por el cual atraviesa el sistema. 

El capitalismo contiene una contradicción sistémica, por un lado, el inevitable incremento de la desigualdad, asociada a la concentración de la riqueza; y, por otro lado, la carcasa del sistema político liberal que vende una promesa de libertad e igualdad de oportunidades para todos, ambas usualmente burladas. 

En su proverbial capacidad de resiliencia o reciclaje, el sistema capitalista acumula un largo tramo histórico gestionando esta contradicción; sin embargo, en algunas sociedades latinoamericanas, las políticas tradicionales que apuntaban a este manejo parecen paulatinamente, inservibles. 

Pudiera pensarse que el proceso en Argentina debió derivar en el fortalecimiento de una alternativa progresista, de izquierda, o al menos más avanzada. Pero las ultimas experiencias gubernamentales de esta índole mostraron, con honrosas excepciones, sus limitaciones para superar el desafío electoral periódico, en un sistema electoral diseñado, en última instancia, para perpetuar los privilegios de las clases oligárquicas dominantes.

Pero las derechas tradicionales que les sustituyeron, a fines de la segunda década del actual siglo, también fracasaron, ahí está el gobierno de Mauricio Macri. En el marasmo político subyacente, emerge para el sistema esta derecha “alternativa”. Partiendo de expresiones marginales, se organizan para el convite electoral, con una organización partidaria mas bien parecida a una religiosa, que genera un fuerte sentido de pertenencia, erigiéndose en los refugios identitarios de personas que se ven como especiales, y maltratadas por el estado de cosas.

Para los sociólogos progresistas, la ideología subyacente es una mezcla explosiva de frustración, estimulada por la postergación de reivindicaciones sociales, que suma el misticismo pseudorreligioso y una mirada en reverso, hacia un ideal de un mundo decimonónico.

 En Nuestra América pululan ilustres pensadores de la ideología de la conspiración, si se permite el sarcasmo en el calificativo, entre los que están detrás de los lideres de la derecha “alternativa”. Se destacan por los casos de Olavo de Carvalho, un antiabortista emblemático, y al argentino Ira Landucci, destacado propalador de las teorías terraplanistas. 

En general, el listado de disparates invitaría a una especie de humor político, pero la alerta está en la cantidad abrumadora de personas que les creen. Aquí tenemos un gran desafío. Los éxitos electorales que puedan alcanzar estas corrientes se explican, en parte, al lograr un discurso movilizador, con un discurso que manipula consignas provenientes de las luchas populares y de izquierda, antisistema puede decirse en paralelo; pero que en el fondo es un encendido verbo anticomunista, lo único realmente autentico. 

Desde el punto de vista clasista, la ultraderecha tiene en sectores de capas medias su público meta, en las que cosecha el grueso del apoyo electoral. Estos sectores, arrojados a un incontenible deterioro socioeconómico, por la lógica concentradora del capital arriba mencionado, recibieron con la pandemia una suerte de tiro de gracia; fue la gota que derramó el vaso. Parece obvio: la frustración se ha convertido en palabra de orden en estos sectores. 

El resto del trabajo lo hace la hiperbolización de las fuentes de la información masiva, vía redes sociales digitales. Una parte de estos sectores medios, abrumados por el proceso de empobrecimiento, muchos de ellos semianalfabetos políticos, son víctimas fáciles de la fanfarronería política de esta “nueva propuesta “derechista.

Volvemos al caso de Javier Milei, el economista y diputado argentino de Libertad Avanza, que se autocalifica de anarcocapitalista y que en su discurso recuerda la consigna antipolíticos “que se vayan todos”, que nos remite al hartazgo popular hacia los políticos tradicionales en su país, que en el 2000 tuvo una salida progresista/Kirchnerista; pero que ahora se fue a la ultraderecha. 

Pronto veremos repetir esta situación en Chile con el exasperante a la presidencia Carlos Kast, que se reivindicó, como una rémora en modo de pesadilla, al tirano Pinochet. La paliza electoral propinada al partido oficial del gobierno de Gabriel Boric por el partido de Kast, en ocasión del referendo constitucional, alerta sobre el eventual fracaso del progresismo en Chile y los peligros de que la ultraderecha lo sustituya en el Palacio de La Moneda. 

El presente se observa caótico, el futuro se antoja incierto. Otra vez lo viejo se niega a desaparecer, y sus alternativas predominantes, al parecer, están superadas. Así las cosas, se puede evocar a Antonio Gramsci, en una de sus frases más icónicas: “El viejo mundo se muere. El nuevo tarda en aparecer. Y en ese claroscuro surgen los monstruos”. Parece ser el caso. Veremos.

Julio Disla