viernes, 21 de mayo de 2021

JESÚS SANTRICH, "DE LOS HOMBRES QUE NUNCA MUEREN".


Las siguientes líneas es de Benedicto González, en la guerra de nombre 'Alirio Córdoba', comandante del Frente 41, del Bloque Caribe de las FARC-EP.

Respira tristeza por la muerte de su jefe y camarada. Durante nuestro reportaje en julio 2012 conversábamos mucho los cuatro mientras disfrutábamos una tarde un delicioso guiso de uno de tantos conejos que Santrich mandaba también. Y lo más increíble es que había bautizado TODOS. Y no me preguntes cómo recordaba los nombres de cada uno de ellos ya que, a parte son todos casi iguales (visto con ojos de un urbano como yo), y peor todavía ya que Santrich era ciego, pero sí, los nombraba cada uno.
Su nivel intelectual su y sencillez impactaba. ¡Que diferencia entre él y su entonces máximo jefe, Rodrigo Londoño, alias Timochenko. Compré el libro sobre la vida de Timochenko en la feria de libros en Bogotá 2017 y el contenido lo resumí a mi viejo amigo y colega del semanario Voz, Roberto Romero con las palabras: "Espero que hay otros cuadros en La Rosa. Si no, ese partido será algo de pasajera".
Sobre la muerte de Santrich, Londoño le acusó por haber traicionado el Acuerdo de Paz, sabiendo todo el mundo quien abandonó a quién cuando el imperialismo yankee intentó de reventar tanto el Acuerdo de Paz como montar el cuento de qué este ex comandante ciego tenía una bodega de diez toneladas de Coca para entregar al Cartel de Sinaloa. Al diario español El País Timochenko dijo:
"... nos traicionó cuando nos la jugamos por la paz. Si no lo hubiera hecho de seguro podría haber contribuido mucho, pero su locura lo llevó a terminar así” [1]
Mientras Santrich será recordado, el señor Londoño es cada vez más repudiado por sus ex hermanos en armas pero elogiado por oligarcas como Juan Manuel Santos.

No era una casualidad que el tercer delegado más votado en la última Conferencia de las FARC fue Santrich mientras Timochenko llegó al quinto lugar. El más votado fue Iván Márquez, el viejo camarada y su amigo inseparable. Dice mucho sobre el ánimo de los ex combatientes.
Y ahí entran las bellas palabras del viejo amigo y camarada, Benedicto González, que en un homenaje literario hermoso dice lo siguiente:
"Ahora eres inmortal, como aquel Arcibel, como Camilo, como los masacrados en las calles durante el paro popular. Ahora miles o tal vez millones querrán leer tu poesía , escuchar tus canciones, conocerte por dentro. Ahora eres semilla, cantera, verso libre que viaja con el viento. Serás Jata al cuello en "Primera línea" del inatajable brete. Serás "décima de la selva" y de ciudades, melodía que penetra al alma y la conciencia. Te saliste con la tuya carajo, moriste para quedar más vivo.
Y ahora que hará el régimen contigo ? Secuestraran tu cuerpo? Quemarán tus libros? Borraran tu poesía ?. El régimen no sabe qué hacer con su pírrica victoria, por eso su silencio sospechoso; otra vez les ganaste la partida. Hasta pronto hermano.

Te despido con los versos que te movían el piso en las parrandas:

"él la vista me negó
para que yo no mirara
y en recompensa me dió,
los ojos bellos del alma"
Jao, Camarada.
Benedicto González.

Jesús Santrich

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