Por: Francis Santana.
En su discurso del pasado 16 de agosto, el presidente Luís Abinader, informó que el gobierno está construyendo el acueducto dual Ocoa-Sabana Larga; pero parece que se olvidó de las veces que ha prometido, hasta con fecha, la terminación del tramo carretero Rancho Arriba-Nizao de solo 12 kilómetros.
Esa obra, el gobierno ha dicho reiteradamente que no la ha podido concluir porque hay un conflicto legal con Odebrecht.
¿Y en las otras carreteras de Ocoa que el gobierno no aborda su construcción con seriedad, existe algún problema de tipo legal?
Los hechos han demostrado, que OCOA NO PUEDE CREER EN LAS PROMESAS DE LUÍS ABINADER.
Y quiero decir algo más: si el pueblo no se une y lucha con firmeza, este gobierno en los dos años que le quedan, TAMPOCO TERMINARÁN EL ACUEDUCTO OCOA-SABANA LARGA.
¡Y OJALÁ QUE ME EQUIVOQUE!
Aunque es cierto que el gobierno viene haciendo algunas obras menores en Ocoa, la gran verdad es que no ha asumido con responsabilidad los trabajos en las principales obras demandadas por las comunidades.
Los trabajos en la carretera El Naranjal-Vengan a Ver están paralizados hace varios meses.
La escuela de El Naranjal lleva siete años en construcción, incluyendo los dos años del presente gobierno y al paso que van, no se sabe cuándo la terminarán.
Por eso es que uno se pregunta: ¿Será creíble que terminarán en 18 meses el acueducto Ocoa-Sabana Larga, cuando no han sido capaces de terminar en dos años el local de una escuela que la encontraron en su fase final de construcción?
Los trabajos en la carretera de Parra, también están paralizados y el cemento que tenían guardado en esta comunidad para continuar la obra, se lo han llevado para otro lugar. Es decir, desvistiendo un santo para vestir otro.
En la carretera de la Parte Alta de El Pinar lo que están haciendo es limpiando cunetas y los equipos que inicialmente enviaron allí, fue para ayantar a la gente, porque a los dos días los retiraron.
Unos 12 sectores del pueblo de Ocoa no han sido asfaltados.
Todos los barrios sufren una gravísima escasez de agua y el gobierno no sabe qué hacer ante esta insoportable crisis que afecta principalmente a los más pobres.
Decenas de familias de La Horma se mueren de hambre y en la pobreza extrema, amenazadas de ser desalojadas de sus tierras, impedidas de sembrar, sin ofrecerles casas, ni tierras para donde trasladarlas y negándose el gobierno a implementar en su zona un plan técnico para la protección de los recursos naturales entre el Estado y los agricultores, que además han sido engañados por Abinader cuando era candidato presidencial y se comprometió a no desalojarlos.
Los moradores de Monte Negro en Rancho Arriba, tienen que atravesar el Río Nizao en un puente de palos y cuando el río hace fuertes crecidas quedan absolutamente incomunicados, mientras que este gobierno indolente, no ha sido capaz de construirles un puente, muy a pesar de también haberlo prometido.
Las carreteras de Mahoma, El Limón, Cazuela, El Rosalito, La Horma, Los Anones y otras, son un verdadero desastre y el gobierno no parece reaccionar ante los justos reclamos de esas laboriosas comunidades.
Los apagones han vuelto a ponerse de moda en Ocoa y el alza de la tarifa eléctrica es simplemente abusiva e insoportable.
¡Tremendo Cambio!
Y como una burla y un abuso inaceptable contra los moradores del sector Las Flores, recientemente se ha reiniciado la construcción de La Bomba de la Muerte debajo de las habitaciones de moradores de este lugar, contando con la complicidad del presente gobierno y de ciertos funcionarios locales.
Por esas y otras calamitosas situaciones por las que viene pasando nuestro pueblo ocoeño, fue que el pasado domingo 14 de agosto se produjo una masiva y contundente marcha-caravana para decirle al presente gobierno que cumpla con sus promesas y deje de estar hablándole mentiras y engañando a nuestra gente.
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